Por Manuel Sandoval
Los grandes medios están en campaña para movilizar a la Convención del PLN. Para los sectores más fuertes de la burguesía costarricense, el PLN sigue siendo el partido más consistente para sacar al chavismo del gobierno y tratar de encarar la tormenta que se anuncia con la guerra comercial que ha desatado Trump con los aranceles a las importaciones norteamericanas que ha impuesto prácticamente de forma generalizada a nivel mundial.
El clima de desencanto y desconfianza hacia los partidos burgueses y el gobierno es muy fuerte, y en este marco el resultado de la Convención puede ser un revés grave para el PLN. Si no logra movilizar los 430 000 electores que votaron en el 2021 (poco más de un 10% del padrón en estos momentos) quedará muy mal parado.
Podría decirse que de los cuatro candidatos no se saca uno. Son figuras bastante limitadas intelectualmente, sin carisma y que sudan en sus intervenciones -“sin querer, queriendo”, como diría el Chavo- mucho de oportunismo y falta de escrúpulos. No son muy diferentes, sin embargo, a sus pares del PUSC y a las “miserias” que esconden debajo de la manga, para ser sus candidatos, Cháves y Pilar.
Esta “pobreza” de su personal político es un problema de la burguesía costarricense, de conjunto, pero incluso a nivel internacional, como queda claro con las figuras centrales y el personal que compone la Administración Trump: Empresarios como Musk manejando la principal potencia capitalista del Planeta como a una empresa personal y gente tan incapaz que le pusieron aranceles a una islita habitada sólo por pingüinos en el Océano Antártico. Yo no lo creía posible, pero sí, es cierto; frente a esto las pifias de Cháves y de su gente (recordemos que Laura Fernández cuando era Ministra de Planificación creía que la frontera de Peñas Blancas estaba en el distrito del mismo nombre de San Ramón de Alajuela) son “nimiedades”.
Es el efecto de la ideología neoliberal que se ha desarrollado en las últimas décadas, que ha empobrecido el acervo cultural y la formación filosófica, moral e intelectual de los burgueses. La ignorancia y la vulgaridad de Cháves son bastante generalizadas en sus pares latinoamericanos y de otras latitudes de la Periferia de Europa, Estados Unidos y Japón, muchos de los cuáles, como Cháves, se deslizan a las posiciones reaccionarias de las Iglesias en contra de los derechos de la mujer y las personas queer. La ofensiva guerrerista en la que están entrando las potencias capitalistas para defender sus intereses en la competencia con sus rivales imperialistas y remontar las economías con el gasto armamentista, se expresa en la desvalorización de la vida humana apoyando el genocidio en Gaza. Trump dio luz verde para “la solución final” en Gaza, y junto a los gobiernos de la “democrática Europa” persigue y deporta masivamente sin ningún respeto por los derechos humanos a los trabajadores migrantes; en esta parte del Continente un Milei que alaba a Netanyahou y al sionismo, tiene a la Bulrich volándole palo y recetándole gases a los pensionados argentinos que se manifiestan ante el Congreso todos los miércoles porque están pasando hambre con las pensiones congeladas.
El régimen carcelario de Bukele, con miles de detenidos inocentes, a los que el estado de excepción niega cualquier recurso legal para defenderse, y decenas de miles de muchachos pobres vinculados a las maras, pero sin delitos de sicariato, levanta admiración en nuestros burgueses (aunque sólo Cháves y Juan Diego Castro lo reivindiquen abiertamente), que claman por más represión y endurecimiento de la legislación penal contra la delicuencia. Abren los bancos de par en par a los dólares del narco, pero no quieren las violencia de las bandas que los acompaña. Algunos hablan de la necesidad de medidas de prevención social para contener el empobrecimiento de los sectores populares, que favorece el fenómeno de la delincuencia en la juventud, pero cínicamente, mientras tanto, en la Asamblea Legislativa todos los partidos de la Oposición burguesa y hasta el mismo Frente Amplio, votan el presupuesto nacional que presenta Nogui Acosta en setiembre de cada año, aceptando a fin de cuentas, con algunos parches que ponen, los recortes que están hundiendo el sistema de educación pública del país, la seguridad social y los servicios sociales que presta el Estado a la población más pobre y necesitada.
Con matices entre ellos que esconden posiciones más reaccionarias en algunos, los precandidatos del PLN, preocupados por la “seguridad ciudadana”, insisten en más policías para retomar el control territorial, endurecimiento de la legislación penal y operatividad del Poder Judicial para condenar y encarcelar rápido, así como medidas para ampliar la prevención social. Ramos insiste en este último aspecto, haciendo mención reiteradamente a un parque que se encontró iluminado y abierto en Santa Ana por la noche, para que los muchachos del barrio se divirtieran sanamente y de forma segura. En el debate de anoche en Teletica, Deyanira Calvo expresó claramente el abismo entre estos “buenos propósitos” y la política que verdaderamente aplicarán, cuando señaló que ya electa como Presidenta buscará los recursos para las políticas de “seguridad ciudadana”, pagarle a la Caja, volver a levantar la Educación Pública y todas las nobles intenciones que supuestamente los acompañan.
La única forma de allegar recursos a las arcas del Estado costarricense (sin ponerle más impuestos al pueblo) es meter en cintura a los grandes empresarios y banqueros que estafan al fisco. NO HAY OTRA FORMA y el político burgués que no lo diga, engaña a los votantes de nuevo. El gran fraude que ha resultado Cháves, es que no pasa de hacer alboroto demagógicamente contra estos pillos y NO LES SOCA LA FAJA porque son los intereses que defiende este gobierno.
Es evidente, que los precandidatos del PLN, guardando silencio ante el fraude fiscal, seguirían la misma política de Cháves y Nogui Acosta de continuar recortando el gasto del Estado, en un escenario para el próximo gobierno en que por la guerra comercial que ha lanzado Trump a nivel mundial se puede deteriorar toda la estabilidad fiscal que ha logrado Nogui Acosta con endeudamiento y recorte del gasto público.
No podemos terminar esta nota sin señalar, por eso, otra forma en que se manifiesta “la vaciedad política”, por decirlo de alguna forma, de los precandidatos del PLN. Más allá de que la prensa haya evitado preguntarles, ninguno hizo referencia al ataque de Trump al país con la imposición de aranceles del 10% a nuestros productos. Una situación grave porque el modelo de desarrollo económico que sigue el conjunto de la burguesía costarricense se basa en el impulso a las exportaciones y la apertura comercial, y aunque este tipo de desarrollo tiende a concentrar la riqueza en manos de la burguesía y generar pobreza en los sectores populares, no puede negarse que le ha permitido al país una estabilidad relativa.
Cháves se cuadró desde el gobierno de Biden, en la política de bloquear a China en el campo de las telecomunicaciones, cerrando el ICE a negocios con empresas chinas para implementar la tecnología del 5G. Priorizó así la subordinación a los intereses comerciales de Washington por sobre los intereses del país, que exigen una postura independiente (hay que ponerle mucha atención a lo que está pasando en el ICE, porque al parecer las fichas de Cháves en la Institución se están beneficiando de la relación con empresas gringas). Con la visita reciente del Secretario de Estado, Marcos Rubio, el servilismo de Cháves se expresó en que aceptó recibir a trabajadores migrantes deportados de Estados Unidos y encerrarlos en el CATEM en la Zona Sur, en condiciones violatorias de sus derechos humanos. Más aún, no ha protestado por la represalia de la Embajada norteamericana que han sufrido varias diputadas(os), la Auditora del ICE y Oscar Arias, a los que se les retiró la visa para Estados Unidos por las críticas que han hecho al monopolio que se le ha dado a empresas gringas en las contrataciones del ICE.
Los aranceles que le puso Trump a nuestros productos son ilegales en el marco del Tratado de Libre Comercio entre Centroamérica y Estados Unidos. ¿Cómo puede ser que ninguno de los precandidatos liberacionistas se pronuncie claramente sobre este problema? ¿Van a defender la soberanía del país frente a este atropello de Trump? ¿SEGUIRÁN EL CURSO RASTRERO DE CHÁVES? ¿DE QUÉ SIRVIÓ REBAJARSE TANTO?