Por Alex Burguess
En los próximos días los diputados en la Asamblea Nacional se aprestan a aprobar una reforma al Presupuesto 2012. La propuesta de reforma ha sido enviada por el propio Ortega, quien busca “distribuir” los montos que devienen de la sobre recaudación tributaria. ¿Qué debemos exigir a los diputados y al gobierno?
En los meses de septiembre y octubre de cada año, la Asamblea Nacional inicia el proceso de discusión y aprobación del Presupuesto General de la República del año subsiguiente, es decir, el Presupuesto del año 2012 ha sido discutido y aprobado en el año 2011.
Por tanto, es lógico suponer que el Presupuesto se hace con proyecciones de recaudación tributarias. A septiembre del corriente año, Daniel Ortega envió a la Asamblea Nacional un Proyecto de Reforma a la Ley General de Presupuesto de la República para el corriente año 2012. La base material de tal solicitud es una sobre-recaudación de 3,253.3 millones de Córdobas (136.71 millones de Dólares al 19 de Septiembre).
El manejo de la macroeconomía: la clave
La clave de la sobre-recaudación radica en la estructurada política del FSLN como gobierno y como grupo burgués de mantener en orden la macroeconomía nacional. Esto pasa por mantener las “garantías del libre mercado”, someterse a las directrices del FMI, y mantener una fluida y fructífera relación con la burguesía y oligarquía nacional (ver artículo en esta edición del ESCA).
El “crecimiento económico” se anuncia con bombos y platillos por el gobierno sandinista: “Tras concluir el mes de agosto y transcurriendo los primeros días de septiembre, las exportaciones acumuladas de nuestros principales productos sobrepasan los 1 mil 879 millones de dólares, cifra superior a los mil 638 millones de dólares registrado en el mismo periodo del 2011, reseña el Centro de Tramite de las Exportaciones (CETREX).” (El 19 digital.- 04/09/2012).
¿A dónde se fue el dinero?
La dinamización económica fuente de la sobre-recaudación sin embargo, parece diluirse en los entretelones de los intereses de la burguesía nacional (incluyendo a la burguesía sandinista). Ni siquiera las mismas publicaciones pro-gobierno pueden maquillar la anti-clasista distribución de los recursos estatales, y afirman: “En el nuevo presupuesto se aplica una reasignación al Ministerio de Educación, hasta por un monto de C$171.8 millones con el propósito de privilegiar aquellas partidas presupuestarias vinculadas a crear un entorno favorable a los estudiantes de las escuelas públicas.” (La Voz del Sandinismo.- 19/09/2012) Hasta aquí todo parece apuntar bien, mas sin embargo, esto cambia cuando es verdad conocida que el “entorno favorable” a que se refiere la publicación pro-gobierno se refiere al pagar a ALBANISA el seudo subsidio que a su vez ésta paga a la Transnacional GAS NATURAL (antes Unión Fenosa) por el servicio de energía eléctrica a los centros escolares. Mas descabellado aún, es que se hayan asignado 170 millones de Córdobas más al Consejo Supremo Electoral a efectos de la realización de los comicios electorales.
Otra de las guindas que defiende el gobierno y su bancada radica en: “Es importante destacar que la reforma presupuestaria está incrementando el gasto de capital en 6.30 por ciento, equivalente a un monto de C$614.68 millones, siendo el nuevo monto proyectado de C$10,383.25. Esto nos indica que el gobierno está haciendo esfuerzos por incrementar el gasto real en el programa de inversiones públicas” (Ídem). De la frialdad de las cifras, se entiende que el Presupuesto para Gastos de Capital sólo equivale al 25% del total de presupuesto, lo que significa que el 75% es destinado a “Gasto Corriente”.
¿Y los salarios?
Si partimos de que la gran mayoría del Presupuesto de todas las instituciones estatales está dirigido al “Gasto Corriente” donde se encuentran los salarios, podríamos suponer que los empleados estatales gozan de salarios decentes…. Nada más lejos de la verdad. Vemos las cifras. Al 1 de Septiembre del corriente, el Salario Mínimo del sector Público se reajustó hasta alcanzar la suma de C$ 2,876.05 (US $ 121.15), un salario de extrema miseria, si tomamos en cuenta que la Canasta Básica hasta Julio 2012 se cotizaba en: C$ 10,335.10 (US $ 435.35), o sea que un trabajador del Estado que solamente gana el salario Mínimo puede costear con su salario únicamente el 27.8 % de la Canasta Básica.
De acuerdo al documento “Nicaragua en Cifras” elaborado por el Banco Central de Nicaragua en el año 2011, para el año 2009 (último año para el que tienen cifras) los trabajadores en el Sector Público ascendían a 90,200 trabajadores. Para el año 2008, el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) reportaba: 122,159 trabajadores dentro del sector público.
Ante la precaria situación de los trabajadores públicos, el FSLN de forma populista ha otorgado hace un par de años el llamado “Bono Solidario” que en la actualidad ronda los C$ 750.00 (US $ 31.59) mensuales a los trabajadores públicos cuyo salario es inferior a las C$ 5,000.00 (US $ 210.62). En algún lado las cifras estatales no coinciden con las del gobernante FSLN, si bien es cierto las cifras más actualizadas de la cantidad de empleados del sector público son del 2009 y 2008 (BCN e INSS respectivamente), el pasado 4 de Septiembre Rosario Murillo señalaba: “estará siendo entregado a partir del jueves 6 concluyendo el viernes 21 (de septiembre). Estamos hablando de casi 170 mil compañeros y compañeras, familias nicaragüenses que reciben este complemento para mejorar sus vidas” (El 19 Digital.- 04/09/2012). Es decir, o la Sra. Murillo infla las cifras de los trabajadores públicos beneficiados, o el INSS y el BCN no poseen registros precisos de los empleados públicos, pues si en 2008 el número total era de 122,159, ahora resulta que son 170,000 solamente los que ganan menos de C$ 5,000.00 mensuales.
Reforma: más de lo mismo
En resumidas cuentas, la Reforma Presupuestaria recién aprobada es más de lo mismo: la repartición del pastel en las instituciones estatales, siendo el trabajador público al que solamente le tocan las migajas sobrantes de la repartición. El FSLN, en los hechos, posee una política anti-clasista. Si bien es cierto, es correcto cualquier programa que beneficie a los trabajadores; lo correcto, y el eje de lucha de la clase obrera debe ser que el Presupuesto sea dirigido específicamente a la mejora inmediata de la calidad de vida de los trabajadores. Por lo tanto, la lucha por un salario mínimo que cubra toda la Canasta Básica debe ser nuestra consigna principal.
¡aumento en el techo excento para los trabajadores!
Igualmente, dentro de la política fiscal del Gobierno sandinista, se encuentra “bala en boca” la próxima reforma tributaria. El FSLN se ha apresurado a presentar una propuesta que hasta la fecha no se ha hecho pública, y que se guarda bajo siete llaves para el ciudadano común… no así para la burguesía que se ha apresurado a crear sus “mesas de negociaciones” con el gobierno, todo a fin de garantizar sus altísimos beneficios fiscales.
El doble rasero del techo exento para los trabajadores
En enero del 2010 entró en vigencia la Ley 712, misma que estableció un doble rasero para los trabajadores, haciendo una desigual distinción entre “trabajadores por cuenta propia” y “asalariados”; para los primeros estableció como monto exento del pago del Impuesto sobre la Renta la suma de C$ 50,000.00 (US $ 2,106.19) anuales; y para los segundos la suma de C$ 75,000.00 (US $ 3,159.29) anuales. Esta medida populista buscaba congraciarse con los empleados públicos y trabajadores del sector forma, que son la mayoría (1,222,200), versus 856,600 de trabajadores por cuenta propia (datos BCN para el 2011). En términos reales, el salario exento mensual es de C$ 4,166.67 (US $ 175.52) para los trabajadores por cuenta propia, y de C$ 6,250.00 (US $ 263.27) para los asalariados.
El Impuesto sobre la Renta de acuerdo a la retórica burguesa está dirigido a gravar la “riqueza”, suponiéndose que el salario exento o su techo, corresponde al Mínimo Vital de Subsistencia, es decir el salario para costearse lo básico de una vida digna. Partiendo de tal afirmación, tenemos que el techo exento en nuestro país es una burla si tomamos en cuenta que la Canasta Básica hasta Julio 2012 se cotizaba en: C$ 10,335.10 (US $ 435.35), o sea que el mínimo exento sólo cubre el 40.32% de la Canasta para los trabajadores por cuenta propia, y el 60.47% para los asalariados. Así pues, el Gobierno nos considera ricos y nos cobra impuestos cuando no podemos ni siquiera cubrir el total de la Canasta Básica.
Ante la próxima embestida fiscal del gobierno sandinista en alianza con la burguesía, los trabajadores debemos luchar por que el Costo de la Canasta Básica esté exento de Impuestos sobre la Renta. En los hechos estamos pagando impuestos por ser pobres, mientras el gobierno “nutre” a la burguesía con exenciones e incentivos