Por Sebastián de la Torre.
Desde inicio del año, los trabajadores, empresarios y el gobierno se sentaron en una mesa tripartita para discutir el incremento al salario mínimo. Al terminar estas negociaciones, las tres partes anunciaron con júbilo un incremento anual del salario que tendrá un pico del 12.5 anual, pero ¿realmente este incremento beneficia a la población trabajadora? o es un espejismo que solo intenta mitigar los constantes incrementos en la canasta básica.
Muchos en nuestra sociedad entienden el salario como una retribución que recibe el trabajador por su trabajo La palabra salario proviene del latín salárium y representaba el pago en sal que se le entregaba a los trabajadores en el antiguo imperio romano. La verdadera definición del salario es el pago que el mismo trabajador crea con su fuerza de trabajo, incluyendo a la plusvalía del capitalista. Es decir, el trabajador es el que crea la riqueza del empresario, recibiendo solo una parte de esta riqueza, que en su mayor parte se la quedan los patronos. Visto de otra forma, para que el empresario se enriquezca debe bajar los costos de producción, disminuir los salarios o mandar a la calle a sus trabajadores recargando de trabajo a los obreros restantes.
Es precisamente por esto que debemos tomar con pinzas este incremento en el salario mínimo. En economía si aumentan los ingresos, la proporción del ingreso gastado en alimentos disminuye, incluso es probable que el gasto real en alimentación aumente en términos absolutos. Es por esto que el incremento del salario mínimo dado este año no significa una mejoría en el nivel de vida de los trabajadores, todo lo contrario, no llegará a cubrir el aumento estrepitoso de los precios de la canasta básica.
Según datos del Banco Central de Nicaragua la canasta básica terminó en diciembre del 2011 en 10,135.9 córdobas (La Prensa 14/01/2012). Pero la carestía de la vida en el país no se detuvo en el 2011, sobre todo por el incremento de los precios de la energía y los combustibles: “el Instituto Nacional de Defensa del Consumidor reportó este mes un incremento de 432 córdobas en el precio de la canasta básica, que se cotiza en 11,943 córdobas.” (La Prensa 17/03/2012) A pesar de que el gobierno y las centrales obreras ligadas al gobierno anuncian con bombos y platillos el incremento del 12.5% anual en el salario mínimo, el pueblo sigue pagando enormes precios por la canasta básica que termina ahogando cualquier incremento ínfimo de salario proyectado para este año.
Nicaragua no se enriqueció en las pasadas 2 décadas ni disminuyó la pobreza, dándole menos importancia a la agricultura que es la base de la pirámide alimenticia. En economía si la proporción del "Coeficiente de Engel" es alto, significa que un país es de naturaleza pobre económicamente hablando. Por el contrario, si este coeficiente es bajo, denota que nos encontramos ante un país rico en lo que a nivel económico se refiere. Para darnos una idea de lo que esta ley dice podemos observar el siguiente gráfico.
Fuente: Elaboración propia en base a los informes del BCN.
En esta representación gráfica del costo de la canasta básica dividida en tres grandes grupos de los productos que contiene podemos apreciar el comportamiento que han tenido en los últimos veinte años. Para su elaboración se consideraron tres grandes rubros los cuales representan las necesidades más inmediatas que las familias deben satisfacer. En honor a la verdad, la pobreza del país y los altos costos de la vida es producto de 15 años de políticas neoliberales, pero el actual gobierno sigue manejando un discurso de izquierda pero aplicando medidas neoliberales.
Es por esto que la mayoría de la población no puede acceder libremente a los productos básicos, ni siquiera a los alimentos que tienen prioridad sobre los otros dos subgrupos, lo que nos apunta claramente que la población tiene que gastar más en alimentos aunque no quiera. Quedándole una proporción muy baja o inexistente en muchos casos, para gastar en su entretenimiento, en bienes, enseres o cualquier otra cosa que se nos ocurra por que deben asegurar primero su alimentación (se debe notar que en el gráfico no se incluyen los precios de fármacos).
El incremento del salario mínimo no es suficiente, sobre todo si tomamos en cuenta que el salario mínimo en Nicaragua es el mas bajo de Centroamérica, es por ellos que debemos exigirle al gobierno que el salario mínimo sea homologado al precio de la canasta básica para que la mayoría de la población tenga por lo menos el derecho a sufragar los gastos básicos para vivir.