Por Sebastián Ernesto Guevara
El país se encuentra conmocionado por la muerte del periodista David Romero Ellner, prisionero del régimen desde hace más de un año por una condena injusta producto de un juicio sobre injurias y calumnias, el sistema judicial lo condenó a más de 10 años de prisión por proferir frases que son penalizadas por el recién derogado Código Penal. Según analistas y especialistas en el tema penal, tales declaraciones no ameritaban una condena tan severa y fue una represalia del régimen de Juan Orlando por la permanente denuncia que el periodista hacía sobre casos de corrupción. El señor Romero había sido hospitalizado desde hace 15 días por haber contraído Covid-19, enfermedad que se le fue complicando con tan fatídico desenlace el día de hoy 18 de julio.
“Ricos y pobres en el mismo cagadal”
El subtítulo anterior corresponde a una declaración hecha por el polémico Adolfo Facussé, ex director de la Asociación Nacional de Industriales (ANDI) y actual cónsul de Turquía en Honduras, quien dijo “Hoy podemos morir todos nosotros. Pueden morir ricos al igual que se están muriendo los pobres. Si usted es rico y quiere ir al Medical Center, le exigen un millón de lempiras sólo para hacer cola… hoy ricos y pobres estamos enchutados en el mismo cagadal”. (Hondusa TV, 12/07/20)
Cualquier persona del pueblo hondureño se emociona fácilmente ante tal declaración, no obstante, Adolfo Facussé al igual que muchos que ahora se lavan las manos fueron férreos defensores del golpe de estado del 2009 y, además, avalaron la sangrienta represión realizada por las Fuerzas Armadas contra militantes del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP). Al parecer, la pandemia ha estremecido el chip de muchos empresarios, sobre todo, de las empresas privadas que han sido afectadas terriblemente por la paralización de la economía nacional y mundial, pero eso no debe borrar de la memoria histórica del pueblo que todos los que apoyaron el golpe de estado y el ascenso al poder del Partido Nacional son tan culpables de la terrible corrupción como el mismo Juan Orlando Hernández.
En cuatro meses de confinamiento del pueblo hondureño, la narcodictadura no ha dejado de atracar el erario y no tienen el mínimo interés en dejar de hacerlo, más bien, han adquirido alianzas internacionales para afinar la estafa permanente y robar por miles de millones de lempiras. Las consecuencias de esta terrible corrupción y que se refleja en un sistema de salud pública colapsado también ha tocado las barbas de los millonarios con el virus Sars-Cov-2, el cual les provoca la enfermedad Covid-19 y, por ende, también se los está llevando a la tumba, sin importar cuánto tengan de dinero.
El acierto de Juan Orlando
Nadie puede desconocer que el gran mérito de Juan Orlando Hernández para mantenerse en el poder es mantener una oposición dividida o bien, cooptar aquellos sectores que en tiempos del FNRP le ocasionaron bastante hendiduras al régimen. Indudablemente que el 28 de junio del 2009 los sectores que ejecutaron y mantuvieron el golpe de estado fueron; la empresa privada (principalmente la banca privada y las transnacionales), la iglesia católica y evangélica, partidos políticos y muchas ONG´S, hay que agregar personajes que después de la consolidación del régimen fueron claudicando poco a poco. Tal es el caso de periodistas que se mantuvieron en lucha frontal contra los siete meses de Micheletti en un primer momento, luego contra Porfirio Lobo y Juan Orlando Hernández posteriormente, pero se doblegaron ante el poder poco a poco y fue muy evidente que aparecieran como nuevos empresarios del sector de la comunicación, comercial o del transporte. De esta forma, Juan Orlando fue encausando la oposición existente hacia su propio beneficio, y cuando no podía callar una voz en contra, utilizó el poder absoluto del estado para ensañarse contra el que se atreviera a levantarle un dedo.
En lo que respecta a los sectores gremiales, sindicales y populares, la mayoría de las dirigencias también fueron aplastadas o compradas, eso explica porque JOH logró salir avante ante tanto caso de corrupción y aún se mantiene en el poder después de 10 años en los que se le ha vinculado al narcotráfico, incluyendo a muchos familiares y políticos del partido Nacional y su comparsa el partido Liberal.
La pandemia ha venido a meter en crisis a toda la población, sin embargo, el sector más golpeado es el empresarial, exceptuando la banca privada, principales defensores a ultranza del régimen y siendo los privilegiados en no perder dinero en esta crisis de cuarentena, siendo un pequeño grupo del régimen el que se lucra con estos monumentales casos de corrupción, dando origen a fisuras entre los sectores que apoyaron ciegamente el golpe de estado y se han comenzado a distanciar del “juanorlandismo”.
¿La separación entre David Romero y LIBRE benefició a JOH en el 2017?
Por supuesto que sí, tal y como ya se señaló, uno de los méritos del régimen es dividir, y esto no es difícil cuando el oportunismo campea en los grupos por muy revolucionarios que sean, si hay oportunismo o sed de poder, es fácil soltar la carnada y esperar que muerdan el anzuelo.
Lo que se sabe en la palestra pública, es que a raíz de un error administrativo de la gerencia de Radio Globo y Globo-TV, el régimen aprovechó para cerrar Globo-TV y sacarles del aire. La denuncia del caso de corrupción en el IHSS en el 2015 y que dio origen a las enormes movilizaciones de las antorchas y que puso en jaque al régimen de JOH en su primer mandato enfrente del ejecutivo no lo perdonarían nunca y lo cobraron con creces.
En mayo del 2016, el régimen ordenó el cierre de Globo-TV, “La Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL) ordenó la suspensión de transmisiones a Globo TV Honduras, el medio más crítico del actual gobierno. El argumento es que la empresa –que difunde sus contenidos en sistemas locales de cable– no renovó el permiso para mantener sus operaciones, el cual venció en febrero pasado”. (25/05/2016, News Mundo).
Por otro lado, en junio del mismo año un nuevo canal inició sus operaciones, UNE-TV, cuyo propietario es un empresario de las telecomunicaciones y militante y aportante del Partido Libertad y Refundación, principal partido opositor en el Congreso Nacional desde la toma del poder de Juan Orlando en enero del 2014.
La herida en el primer partido opositor al régimen estaba hecha y sangraba a chorretes, al problema de una televisora cerrada y otra abierta se sumó los constantes llamados del periodista Romero a que la coordinación de LIBRE sacara la militancia a las calles con el propósito de exigir la apertura nuevamente de Globo-TV, un llamado al que la dirigencia del Partido Libertad y Refundación hizo caso omiso.
Esta crisis ocasionada por el régimen de JOH, inmediatamente tuvo sus efectos, por un lado, los periodistas de Radio Globo disminuyeron el ritmo permanente de denuncias de corrupción y dirigieron los misiles hacia la dirigencia de LIBRE, principalmente atacando a Manuel Zelaya Rosales. La discusión entre los periodistas de Radio Globo contra militantes del Partido Libre se volvió muy visceral, tanta fue la separación que hubo que, para la campaña electoral del 2017, quedaba en manifiesto la posición oficial de la política de radio Globo. Un día después de las elecciones de noviembre del 2017 en las que ganaba Salvador Nasralla por un 5 % de diferencia, David Romero y Héctor Amador denunciaban que militantes de Libertad y Refundación habían pasado por enfrente de las instalaciones durante la mañana y les habían insultado gritando “traidores” y lanzándoles piedras. Cuando los votos rurales anunciados por David Matamoros Batson le dieron vuelta al resultado electoral, en Radio Globo los periodistas saltaban de alegría y se ufanaban de haber vaticinado el triunfo del Partido Nacional.
Un zarpazo a la libertad de prensa
Es innegable el papel de David Romero en la lucha frontal contra el golpe de estado del 2009, sin embargo, como un ser humano que realiza de forma individual su lucha, cometió errores que se han pagado muy caro, siendo uno de ellos el otorgarle armas al propio enemigo para facilitarle la conspiración y mantenerse en el poder. Lo que se debe alabar a Romero Ellner es el derecho a la libertad de prensa que siempre exigió y defendió, un derecho que todo ciudadano o periodista debe defender sin ser motivo para ser encarcelado o asesinado. David Romero fue un defensor a ultranza de este derecho y pagó con cárcel y muerte su deseo de ver una patria libre, equitativa y justa, su legado para el pueblo y los periodistas conscientes debe ser mantener esa lucha permanente contra la opresión y denunciar sin titubear cualquier acto de corrupción.
El régimen ha conspirado visiblemente para asesinar a un periodista, llevan 10 años asesinando luchadores de todos los sectores y todos duelen por igual, ni uno duele más ni uno duele menos, es el momento para que el pueblo se levante y de una vez por todas griten ¡Basta Ya!
Es el momento de unificar la oposición contra el continuismo, pero hay que tener claro, el que diga o ponga condiciones no es un aliado, es un caballo de Troya que viene a volarnos la cabeza, la unificación debe prevalecer alrededor de tumbar la dictadura y erigir un sistema de gobierno desde los trabajadores mismos. El pueblo, muy difícilmente se organizará para salir a las calles para protestar contra la corrupción y contra la narcodictadura, es el momento para que los principales liderazgos, principalmente del movimiento sindical, gremial y popular salgan a flote para enarbolar la bandera de unidad contra el régimen, y obviamente; LIBRE no debe quedar por fuera de esta unidad. Cualquiera que pregone abajo la dictadura o estar en contra de la corrupción debe adherirse a este proyecto, que la muerte de David Romero y la de todos esos compatriotas asesinados por estas bestias infernales sean para unificar al pueblo, que su sacrificio no sea en vano. Salgamos a la calle a gritar y que se escuche en todo el planeta: ¡Basta ya!
¡Basta ya!