Por Horacio Villegas
La propuesta mandada desde el despacho de la presidencia, denominada en un inicio Ley de Reestructuración y Transformación del Sistema Nacional de Salud y Educación, y que fue modificada apenas en una sola sesión del congreso nacional, adoptando el nombre de Ley de Reestructuración y Transformación Presupuestaria de la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación, fue aprobada el 25 de abril, para el asombro de muchos hondureños.
En artículos anteriores, denunciábamos el contraste que existe en el tema de la asignación presupuestaria a las secretarias del Estado, en donde Salud y Educación se quedan en los niveles más bajos de inversión pública. Los fondos los acaparan Seguridad y Defensa, que se traduce en gastos exagerados para seguir sosteniendo las castas militares como los PM, quienes sirven de perros cuidadores de la dictadura nacionalista.
La anunciada “ley de reestructuración y transformación” de estas dos secretarías, tuvo desde su creación formal desde la presidencia y su posterior discusión en el congreso nacional,ofensivas directas para la clase obrera, como ser la cancelación inmediata de los contratos de los trabajadores de estas dos secretarias –así lo detalla el Dictamen del 3 de abril de 2019, artículo 7, “discutido” en el congreso.“ARTÍCULO 7.- Se faculta a las Secretarías de Estado en los Despachos de Salud y de Educación, para que en el marco de las decisiones adoptadas mediante los Decretos Ejecutivos números PCM-026-2018, PCM-027-2018 y el presente Decreto Legislativo, puedan ejecutar las siguientes acciones:
Proceder a la cancelación de los acuerdos de nombramiento y la terminación de los contratos de prestación de servicios, en el contexto de las decisiones adoptadas en el proceso de reestructuración administrativa y organizacional dándole cumplimiento al pago de los derechos y las prestaciones indemnizatorios que conforme a la legislación nacional correspondan en materia de relación de prestación de servicios…” (Dictamen de la Comisión Especial del Congreso, sobre Ley de Reestructuración y Transformación del Sistema Nacional de Salud y Educación, p. 5).
Y la otra ofensiva más que notoria para la mayoría de hondureños, y una grieta evidente para efectuar más actos de corrupción, es el encargo que se le hace a las Municipalidades para asumir la inversión tanto en Salud como en Educación –también expresado en el Dictamen del 3 de abril, artículo 11.
“ARTÍCULO 11.- Las Municipalidades deben priorizar los fondos que el Estado les transfiera anualmente para el mejoramiento del Sector de Salud y Educación, tal y como lo establece el Artículo 91 de la Ley de Municipalidades para la cual la Secretaría de Estado en el Despacho de Gobernación, Justicia y Descentralización debe constatar la inversión realizada por cada Municipalidad previo al otorgamiento de las subsiguientes transferencias a realizar en el año 2019, debiendo informar a las Secretarías de Estado relacionadas” (Dictamen de la Comisión Especial del Congreso, sobre Ley de Reestructuración y Transformación del Sistema Nacional de Salud y Educación, p. 10).
La propuesta enviada directamente por el ejecutivo al Congreso Nacional, expresa las motivaciones suficientes que tienen los nacionalistas en el tema de las instituciones del Estado. Los despidos masivos responden a esa necesidad que tiene el partido de gobierno en suplantar varios puestos dentro de estas dos secretarias y a la vez, cumplir con las medidas de recortes en el sector público, que los organismos financieros internacionales como el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial ponen en la mesa.
La propuesta que fue modificada y aprobada el jueves 25 de abril en el Congreso Nacional, y que dio motivos de reprimendas por parte de algunos diputados de la Oposición, fue conocida y consensuada únicamente por los diputados nacionalistas, quienes a través del secretario del congreso, Tomás Zambrano, apresuraron dicha aprobación a pesar de las inconsistencias y el ambiente de conflicto que existía en el hemiciclo.
Para el asombro de la mayoría de los hondureños que estuvimos pendientes de esta arbitraria aprobación, la propuesta que se estaba leyendo en voz alta, ya no contenía en los artículos enunciados, la tan polémica descripción de los despidos masivos de empleados de las dos secretarias en cuestión. Los artículos que fueron leídos por Zambrano referidos al tema de “educación”, antes de la interrupción que hicieran los diputados de libre, expresaban lo siguiente:
ARTÍCULO 1.- Se faculta a la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación, para que en acompañamiento de la Comisión Especial para la Transformación de la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación, proceda a la revisión del presupuesto y Plan Operativo Anual (POA), a efectos de que pueda identificarse todo el recurso presupuestario de la Secretaría en mención, y reasignado para el desarrollo de áreas especiales que lo necesiten, en aras de lograr una adecuada atención de la población en los servicios de educación para alcanzar los siguientes objetivos:
- Atender las necesidades de infraestructura de los centros educativos a nivel nacional;
- Apoyar logísticamente a los educandos y Docentes con la dotación de textos, mobiliario y material didáctico;
- Fortalecer los procesos de formación docente y cubrir las necesidades de la demanda educativa con la contratación de personal;
- Cumplir con los compromisos salariales adquiridos y pasivo laboral pendientes de pago; y,
- Cualquier otro para lograr la suficiente implementación del Plan de implementación del PESE” (Dictamen de la Comisión Especial del Congreso, sobre Ley de Reestructuración y Transformación Presupuestaria de la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación, pp. 4-5, leída el 25 de abril de 2019).
Este Congreso Nacional surgido en el marco del fraude electoral, se ha caracterizado por dar rienda a ciertas aprobaciones de leyes que terminan siendo modificadas a la hora de su conocimiento público en la gaceta. El nacionalista recalcitrante, Toño Rivera Callejas, fue señalado por la MACCIH en un caso de fe de erratas, que evidenció de manera general el proceder errático y tramposo de los diputados nacionalistas. El contenido distinto que llegó a leerse en esta ley modificada a raja tabla, sin suficiente discusión, y conocida sólo por la bancada cachureca, dista mucho de la primera propuesta consensuada por la presidencia y ciertos sindicatos llamados por la opinión general como “traidores”, pues ya no se habla de manera directa de los despidos masivos, más bien se hace mención de un cierto apoyo a las necesidades que existen en la infraestructura de educación y salud.
Movilicémonos junto a los sectores educación y salud, por la elaboración de una nueva propuesta construida desde los gremios más coherentes con la lucha social
Lo más seguro que pensamos la mayoría de hondureños al ver este cambio brusco en las propuestas de ley de dos secretarías primarias y vitales, es que del gobierno y de las bancadas de los partidos tradicionales no se puede esperar una propuesta que reúna las mejores intenciones, que atiendan las necesidades urgentes de salud y educación. Sólo los colegios magisteriales que han demostrado ser honestos y coherentes, y otras organizaciones gremiales de los maestros que también han sabido expulsar sus elementos corruptos y alineados al gobierno a través de sus patrones, pueden elaborar una propuesta que resuelva la crisis que existe en el sector salud y educación.
El hecho de aceptar leyes dadivosas de este gobierno, que hasta este momento se interesa por las dos áreas de fundamental importancia como es salud y educación, engendra en la mayoría de hondureños honestos, una cierta reticencia, debido a las mañosos y malintencionados procederes de una dictadura que todavía se encuentra enquistada en el gobierno a punta de fraude y represión. Solo las movilizaciones permanentes y la organización de una nueva propuesta de ley construida desde las organizaciones gremiales, el movimiento social, colegios magisteriales, y sindicatos coherentes con la lucha por la salud y educación pública, podrá atender los problemas latentes que existen en estas dos secretarias de mayor importancia.
Un primer paso
El Paro Nacional convocado para el día viernes 25 de abril, tuvo una repuesta formidable por parte de los gremios médicos y de maestros. El gobierno se ha visto obligado a declarar que no habría despidos, porque teme a la movilización de los trabajadores. Este paro debe ser solo el inicio de nuevas jornadas de luchas, hasta que logremos la derogación de la Ley que perjudica a los trabajadores y el pueblo. Y la única manera de derrotar al gobierno de JOH y sus aliados en el Congreso Nacional, es convocando a un gran Paro Nacional de por lo menos 72 horas que paralice completamente al país. Es la única manera de poner de rodillas al gobierno de JOH y al Congreso Nacional.
Llamamos a los gremios médicos y del sector salud, así como a los colegios magisteriales, a cerrar filas en torno a la consigna unitaria de derogación de la ley recientemente aprobada. No debemos creer en las promesas del gobierno de JOH, debemos marchar unidos todos los gremios y sectores de trabajadores, para detener de una vez por todas las arbitrariedades de este gobierno antiobrero y antipopular.