Por Marcial Rivera
El 14 de noviembre del corriente año las instalaciones de la Organización No Gubernamental “Pro Búsqueda” fueron allanadas de forma violenta por un grupo de tres sujetos desconocidos, en un operativo similar al que hacían los Escuadrones de la Muerte y los grupos paramilitares durante el conflicto armado Salvadoreño. Los daños materiales -independientemente de a cuánto ascienden- son bastante altos, y la pérdida de documentos valiosos lo es también.
¿ProBúsqueda?
Para entender un poco el contexto debe hacerse alusión al significado que tiene ProBúsqueda en el contexto salvadoreño. Esta Organización No Gubernamental fue fundada por el fallecido Sacerdote Jesuita -de origen Español- Jon Cortina s.j., quien además de acompañar los procesos de repoblación en el área de Guarjila y otros cantones aledaños en Chalatenango, también vio la necesidad de la búsqueda de niños que durante el conflicto armado fueron desaparecidos por el ejército y los cuerpos paramilitares, quienes tenían como práctica el secuestro de los mismos y su adopción en el extranjero.
Según su página web la misión de ProBúsqueda consiste en "Somos una asociación del movimiento de derechos humanos que realiza la búsqueda de niñas y niños desaparecidos a consecuencia del conflicto armado, que promueve sus derechos, el conocimiento de la verdad, el acceso a la justicia y la reparación integral para las personas desaparecidas y sus familiares." ProBúsqueda a su vez ha logrado la re-unificación de niñas y niños desaparecidos con sus respectivos familiares, en más de 300 casos; debe tomarse en cuenta que cada uno de estos casos constituye un esfuerzo de todo tipo, aparte de la atención psicosocial que se da a las víctimas directas de las desapariciones forzosas que se dieron durante la guerra.
Distintas Hipótesis
En la investigación del caso, al momento se manejan dos hipótesis: Una es que el atentado a las instalaciones de ProBúsqueda fue ocasionado por un ex empleado que fue removido de esta institución debido a malos manejos en la administración de fondos y la parte administrativa; la segunda hipótesis es que este hecho fue un atentado político. En cualquiera de los casos este es un caso que ha conmocionado a la sociedad salvadoreña, fundamentalmente por la forma en que se dieron los hechos. Debe destacarse que en este hecho se dio el robo de equipo informático y la destrucción de material impreso que aparentemente contenía evidencia de algunas desapariciones, en torno a las cuales se solicitarían recursos de hábeas corpus en la Sala de lo Constitucional, además de información de contabilidad. No debe dejar de mencionarse que la forma en que se dio el atentado evidencia que no se trató de un simple robo, en el que se sustrajera insumos valiosos de esta organización, sino más bien es lógico que lo que se quería era sustraer equipo y destruir material que contenía información contable y de casos de desapariciones forzosas.
De igual forma, la investigación de este caso se hace imperativa, en momentos en que se hilvana la discusión respecto a la declaratoria de inconstitucionalidad de la Ley de Amnistía General para la Consolidación de la Paz, y donde ya se tienen los antecedentes del cierre de la oficina de Tutela Legal del Arzobispado y la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en la que se establece la derogatoria de la Ley mencionada.
Exigimos Investigación
Tanto Naciones Unidas, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos han condenado el hecho y han instado al gobierno salvadoreño a promover la investigación de este hecho, así como el resguardo de las empleadas y los empleados de esta organización; pues es evidente que de no resguardarse la seguridad de esta Organización No Gubernamental, y de la gente que labora en la misma, podrían darse otros conatos de violencia que pongan en peligro a la misma.
Es claro que en el plano de la defensa de los derechos humanos, recuperación y promoción de la memoria histórica, y del resarcimiento de la población víctima del conflicto armado y de desapariciones forzadas, ProBúsqueda ha sido la organización de vanguardia, y por tanto tiene un lugar protagónico en la sociedad salvadoreña. Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) exhortamos de forma vehemente a la Fiscalía General de la República, a la Policía Nacional Civil y al gobierno salvadoreño, a que cumplan con su deber y acompañen el proceso de investigación de este atentado, así como informar a la población de los avances en la misma. A las organizaciones de derechos humanos, sindicatos y organizaciones campesinas, estudiantiles e indígenas les instamos a formar una comisión que fiscalice las investigaciones, y que se coordinen para frenar la represión.