Tengo fe, hermanos, que un día saldrá a la luz todas esas tinieblas y que tantos desaparecidos y tantos asesinados y tantos cadáveres sin identificar y tantos secuestros que no se supo quien los hizo, tendrán que salir a luz y entonces tal vez nos quedemos atónitos sabiendo quienes fueron sus autores. (Monseñor Romero, 16 de junio de 1979)
Por Germán Aquino
¿Quienes son los autores intelectuales y materiales del asesinato de los Jesuitas?
El asesinato de los Jesuitas “caso ilustrativo” fue como le denominó la Comisión de la Verdad en su informe para iniciar el abordaje “Violencia contra opositores por parte de agentes del estado”, para poder así referirse a la represión política.
En el contexto de la ofensiva las Fuerzas Armadas Salvadoreña fieles defensoras de los intereses de las clases económicamente dominante violentan las instalaciones de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (UCA) y cometen los asesinatos de: Ignacio Ellacuria, Segundo Montes, Ignacio Martín Baró, Amando López, Juan Ramón Moreno, Joaquín López; todos ellos Jesuitas e intelectuales críticos del sistema e injusticias que imperaban en ese momento quienes se identificaban con el sufrimiento del pueblo; Junto a ellos también fueron asesinadas dos empleadas: Elba y Celina Ramos.
El asesinato de los Jesuitas es solo un caso para ilustrar la represión y la violencia política de la cual históricamente ha sido víctima la cual la clase trabajadora, el campesinado y demás sectores populares por parte del estado y de los diferentes gobiernos quienes han tenido como e función el mantener la dominación de los oligarcas y burgueses; este estado aun con la llegada de Mauricio Funes y del FMLN al gobierno mantiene su carácter represivo de clase. Si analizamos tan solo un pequeño periodo de la historia de El Salvador el de 1980 a 1992 periodo en el cual se desarrolló la guerra se tiene como resultado un aproximadoi de 75,000 muertos y 12,000 desaparecidos.
Según el informe de la Comisión de la Verdad respecto del asesinato de lo Jesuitas plantea las siguiente conclusiones y recomendaciones: “1. Existe sustancial prueba de que el entonces Coronel Rene Emilio Ponce en la noche del día 15 de noviembre de 1989, en presencia de y en confabulación con el General Juan Rafael Bustillo, el entonces Coronel Juan Orlando Zepeda, el Coronel Inocente Orlando Montano y el Coronel Francisco Elena Fuentes, dio al Coronel Guillermo Alfredo Benavides la orden de dar muerte al sacerdote Ignacio Ellacuria sin dejar testigos. Para ello dispuso de una unidad del Batallón Atlacatl que dos días antes se había enviado a hacer un registro en la residencia de los sacerdotes”. 2….el General Gilberto Rubio Rubio tomo medidas para ocultarlo…..3..b) el operativo fue organizado por el entonces Mayor Carlos Camilo Hernández Barahona y ejecutado por un grupo de soldados del Batallón Atlactl al mando del teniente José Ricardo Espinoza Guerra y el Subteniente Gonzalo Guevara Cerritos acompañados del Teniente Yussy Rene Mendoza Vallecillos….4…a) El Coronel Oscar Alberto León Linares… oculto pruebas incriminatorias, b) el Coronel Manuel Antonio Rivas Mejía…conoció los hechos y oculto la verdad …c) el Coronel Nelson Ivan López y López conoció la verdad de lo ocurrido y la oculto..5: El Licenciado Rodolfo Antonio Parker Soto altero las declaraciones para ocultar las responsabilidades de la altos oficiales.
Entre otras cosas también en el informe se plantea que “El Presidente Cristiani se reunió con el Alto mando (del cual eran parte mencionados arriba) entre las 12.00 m. y las 2.30 a,m del día 16. Día en que fueron asesinados los Jesuitas. De todos los nombrados por la Comisión de la verdad únicamente fueron declarados culpables por los asesinatos El coronel Guillermo Alfredo Benavides Moreno y teniente Yussy Rene Mendoza Vallecillos.
Al igual que todos los crímenes y violaciones a los Derechos Humanos cometidos por el estado contra el pueblo durante el conflicto armado quedaron nuevamente en la impunidad mediante la Ley de Amnistía General emitida en 1993 durante el Presidente Arenero Alfredo Cristiani.
Por la derogatoria de la Ley de Amnistía
La clase trabajadora, el campesinado, los pueblos originarios y demás sectores populares tiene que movilizarse y exigir al gobierno de Mauricio Funes y del FMLN la derogatoria de la Ley Amnistía para castigar a los asesinos del pueblo; solo planteamiento de la derogatoria de la Ley de Amnistía asusta a los militares, a los oligarcas y burgueses ante lo cual el ex Presidente Arenero Alfredo Cristiani quien gobernaba durante el asesinato de Jesuitas a expresado: “no reabrir heridas y reiteró su rechazo a una posible derogación de una ley de amnistía aprobada en 1993 y de derogarse "de todos es conocido que los que pueden tener más problemas son los del FMLN".
Los miembros del FMLN tienen que demostrar al pueblo que de su parte no existe ningún temor de que dicha Ley se derogué. La Ley de Amnistía dejo impune todos los crimines cometidos contra del pueblo además es una clara burla al Sistema de Protección Internacional de los Derechos Humanos ya que deja sin efecto Tratados, Convenciones internacionales; demostrando que los Estados burgueses pueden jugar con estos a su conveniencia e irrespetar los Derechos Humanos cuando ellos lo quieran.
El gobierno de Mauricio Funes y del FMLN tiene que dar castigo ejemplar a los autores intelectuales y materiales del asesinato de los jesuitas
En estos 20 aniversario de conmemoración del asesinato de los Jesuitas tuvieron como especial un Homenaje póstumo el cual fue realizado por el Gobierno de Mauricio Funes y del FMLN quien con respecto a la búsqueda de la verdad y el castigo a los asesinos se expreso :”No me corresponde a mi, ni a este gobierno, respetuoso de la institucionalidad, juzgar a quienes asesinaron a los padres jesuitas y sus dos colaboradoras; esa es tarea de los tribunales de justicia y de instituciones, como el ministerio publico, que tiene por mandato constitucional, el monopolio de la acción penal. La función de un gobierno, como el que presido, que tiene como objetivo, la unidad de todas y todos, y los valores supremos de la paz y la justicia, es contribuir, a crear el clima de entendimiento y de verdad, que permite dejar atrás un pasado de tragedia y dolor, para comenzar a construir una paz justa, segura e inclusiva”(Mensaje de la Presidencia dia: 16 de Noviembre de 2009). No puede existir paz y justicia cuando los asesinos y verdugos del pueblo están impunes; el pueblo no puede dejar atrás el pasado por de ser así estamos condenados a volver a repetirlo.
En la actualidad los Jesuitas ven el caso como cerrado pero reclaman la verdad petición que ha sido negada por el estado salvadoreño pero “La justicia española abrió un proceso contra 14 militares salvadoreños por el asesinato de los seis sacerdotes y sus dos colaboradoras, y la Corte Suprema de Justicia (CSJ) conoció una petición de la justicia española que pide certificación de las diligencias que se abrieron en El Salvador contra esos militares” (La Prensa Grafica 17/11/09). El gobierno de Mauricio Funes y del FMLN tiene que mantener informado al pueblo de los avances y resultados de dichos procedimiento.
No hay perdón sin confesión y sin castigo
El día 11 de Noviembre de 2009 en el discurso de apertura de la conferencia internacional para Mesoamérica, dedicada a temas como son la gobernabilidad, los derechos humanos y la transparencia el Presidente Funes reconoció la existencia de “profundas desigualdades sociales, la gran concentración de las riquezas y la enorme extensión de exclusión y pobreza” Todos estos y otros mencionados en dicho discurso son propios del sistema capitalista y mientras estos existan la clase trabajadora, el campesinado, las personas pertenecientes a los pueblos originarios y demás sectores populares nos veremos en la obligación de manifestarnos y luchar contra quienes mantienen dichos problema; en ese proceso de lucha de no castigar hoy a los asesinos del pueblo existe el riesgo de ser victimas como en el periodo pasado.
A pesar de que El ministro de Defensa, David Munguía Payés, busca que el pueblo salvadoreño le perdone a el y a las Fuerzas Armadas al expresar que: “Estaríamos dispuestos a pedir perdón. Creo que no solamente la Fuerza Armada, sino todas las personas que participamos en el conflicto deberíamos hacerlo…es el momento oportuno para reconocer los errores del pasado…además, que la Fuerza Armada también está dispuesta a abrir los archivos del Estado si las autoridades pertinentes lo solicitan….Alguna gente cree que tenemos archivos detallados, pero tenemos registros; y si la autoridad competente nos pide abrir esos registros, los vamos a abrir. La petición puede venir desde el mismo presidente de la República” (La Prensa Grafica 17/11/09).
Para lograr el perdón el pueblo salvadoreño tiene que exigirle que confiese todo los operativos en los cuales el participo y las personas que murieron en sus manos cuando participaba en los operativos tierra arrasada para los cuales fue preparado el imperialismo norteamericano en la Escuela de las Américas; además debe confesar y decir los nombres de los demás militares responsables de tantas desapariciones, torturas y asesinatos cometido contra el pueblo.
Juicio y castigo a los autores intelectuales y materiales de los asesinatos cometido en contra del pueblo
La Comisión de la Verdad creada en el Contexto de la firma Acuerdo del Acuerdo de Paz saco a la verdad muchos autores materiales de los crímenes realizados por el estado en el conflicto armado; en la actualidad lo que le corresponde al gobierno de Mauricio Funes y del FMLN es continuar investigando para encontrar más responsables materiales e intelectuales. Las organizaciones de la clase trabajadora, el campesinado, los pueblos originarios y demás sectores populares tenemos que exigir la conformación de una comisión de investigación de todos los crimines cometidos por el estado además también la conformación de un Tribunal del pueblo para juzgar y castigar a todos los responsables; no podemos confiar en el sistema jurídico actual; este se ha burlado siempre del pueblo como ejemplos veamos lo ocurrido al momento de juzgar a los responsables de la muerte de los Jesuitas.
Los familiares de la victimas tienen el derecho a conocer quien fue el asesino de sus familiares; tienen el derecho a saber la verdad con respecto a los miles de desaparecidos; le corresponde a los familiares de las victimas si así lo quieren perdonar el cual es un derecho que el gobierno actual no puede quitarles; los funcionarios en nombre del estado burgués son los que han reprimido al pueblo y en ningún momento puede ser el que perdonen al pueblo; la constante ha sido que el estado es el asesino del pueblo pero a la vez también ha sido el Juzgador y como lo ocurrido con la Ley de Amnistía él fue quien asesinó al pueblo y el que se auto perdonó.