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Por Manuel Rivera

 

A más de 50 días en huelga los Médicos Internos y los del servicio social se mantienen en pie de lucha en contra del convenio de la Secretaría de Salud y la Universidad Católica, avaladas por el Presidente Manuel Zelaya y el Cardenal Oscar Andrés Rodríguez, firmada el pasado 6 de agosto de este año. El convenio consiste en “permitir a los estudiantes de la Universidad Católica realizar su práctica profesional en los hospitales públicos del país”. Este convenio ha traído controversias entre la ex ministra, Elsa Palau, y Víctor Meza, Ministro de Gobernación y Justicia, Hugo Castillo, viceministro de Finanzas y el secretario de Educación, Marlon Brevé. Estas contradicciones no muestran claramente los verdaderos intereses que están en juego.

 

Conflicto de intereses

 

¿Porque el Presidente Mel Zelaya se rehúsa a solventar el problema de los médicos internos? ¿Que hay detrás de este Convenio? ¿A que se debe el silencio del Cardenal en relación a este tema, si forma parte de la firma del convenio?. Creemos que detrás de este convenio hay un claro interés de Mel Zelaya de acercarse a la Iglesia Católica, para evitar que los curas critiquen su gobierno, así como fortalecer a la empresa privada, permitiéndole la explotación de los recursos y bienes del Estado, los cuales deberían de estar a favor y al servicio de la universidad pública y de toda la población, en este caso de los estudiantes que realizan sus labores en los hospitales públicos.

 

La ex ministra Elsa Palau, manifestó que Mel Zelaya “le había ordenado que no acudiera a la Procuraduría ni a la Corte para que se arreglara el asunto, si ellos dos decidieron hacer ese convenio de la forma en que se hizo, ellos son los que pueden decidir anularlo... apelo al cristianismo que predica el cardenal y al amor al pueblo que predica el Presidente, es hora de demostrarlo con hechos” (El Heraldo 1/10/08). Esta declaración no es una casualidad, es parte de la estrategia del gobernante de cuidar los intereses de la empresa privada, por eso sustituyó a la Ministra Palau, que “fue la persona encargada de firmar el convenio entre la Secretaría de Salud y la Universidad Católica”. (El Heraldo 2/10/08). Observamos un poco de coherencia con el discurso que utiliza Mel Zelaya, entre la acción y la palabra. En esta ocasión Mel Zelaya no dice estar a favor de los intereses de la gran mayoría, si no a favor de los intereses de la Iglesia Católica.

 

Subsidio a la Iglesia

 

Como todas las cosas en este país, La Educación y la Salud son un negocio redondo, como un ejemplo claro y concreto la Universidad Católica que recibe más de 100 millones de Lempiras por concepto de matriculas y esto que solo cuenta con mas de 2000 estudiantes y pasantes de la carrera de medicina. Y una parte de este dinero lo utilizan para pagar a los maestros, porque el Convenio da la venia para que puedan la Universidad Católica utilice los espacios de los hospitales utilizando los medios físicos – pedagógicos sin gastar absolutamente nada. Es un subsidio del Estado a la educación privada y específicamente a la Iglesia Católica. Este tipo de iniciativas del Gobierno de Mel Zelaya a favor de la Universidad Católica abre las puertas para que otras instituciones privadas puedan utilizar los recursos del Estado.

 

La Junta de Dirección Universitaria (JDU) exigió “a las autoridades de Salud y a la misma rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) anular de inmediato el convenio que permite a los estudiantes de la Universidad Católica realizar su práctica profesional en los hospitales del Estado”. (La Tribuna 9/9/08). Y para darle el toque legalista, la Procuraduría General de la República (PGR), mediante el abogado del Estado Hondureño, Héctor Herrera, mencionaba “que el acuerdo firmado entre Salud y la universidad privada presenta vicios de nulidad y por lo tanto queda sin valor y efecto, el señor Secretario de Estado en el Despacho de Salud no tiene las facultades para suscribir un convenio con la universidad privada y que las demás disposiciones que están en él, están viciadas de nulidad”. (La Tribuna 8/10/08).

 

Esta declaración del abogado del Estado Hondureño es un claro ejemplo de que hay algo más que un simple acuerdo. ¿Por qué si la Procuraduría dictamina estar en contra del Convenio por que las demás instituciones no acatan ese resolución?

 

Represalia contra los internos

 

Como una medida de presión contra la huelga de los médicos internos que se oponen al Convenio con la Universidad Católica, el ministro de Salud, Carlos Aguilar, respondió con las amenazas y el chantaje, suspendiendo la subvención económica para los internos. “La rescisión del convenio se hizo el sábado pasado, lo que implica que los 400 internos dejarán de percibir los aproximadamente 7,000 lempiras que se les daba como compensación por sus servicios”. (La Prensa 20/10/08). La amenaza con retirarles la beca no ha amedrentado en nada a los médicos internos, los cuales siguen en pie de lucha hasta las últimas consecuencias. Con estas declaraciones del ministro de salud nos queda más claro que hay una inclinación para favorecer a la Universidad Católica.

 

El 24 de octubre se informo que el período académico de los estudiantes de medicina en huelga, ya es insalvable por lo que será cancelado. Rutilia Calderón, vicerrectora académica de la UNAH, declaró que de “Continuar este período académico con los estudiantes de medicina es estar en contra la calidad que y estar en contra de una universidad que está buscando mejorar y no se puede exponer a los estudiantes a un proceso que no se va a cumplir con las exigencias”. La ofensiva gubernamental ha sido brutal contra los médicos en lucha. Aparte de tener la amenaza de perder sus becas ahora pierden su periodo lectivo más.

 

A pesar de las lluvias, la lucha Sigue

 

En el marco de esta lucha se han llevado a cabo marchas, plantones, mítines y asambleas como la máxima instancia de las tomas de decisiones, y en la que los médicos y Facultad de Ciencias Medicas, han estado firmes por la anulación del Convenio con la Universidad Católica, se denuncia a las autoridades del Gobierno por que están manipulando a “los médicos en servicio social que se reunieron el viernes 17 de Octubre por la noche con el ministro de Salud, Carlos Aguilar, y firmaron un acta de compromiso para retornar a sus actividades (…) Aquí nada se ha dividido porque los compañeros en servicio social hayan acordado con las autoridades de Salud retornar a las actividades sin haber logrado nada, no quiere decir que nosotros no vamos a luchar por la justicia, es más, se está fortaleciendo porque las acciones ahora vienen más fuertes porque los internos somos casi 7 mil, desde segundo año hasta sexto y los de servicio social sólo son 300”.(La Tribuna 19/10/08)

 

El día 20 de Octubre, los médicos internos en lucha realizaron un plantón frente a los edificios de la Corte Suprema de Justicia, presionando para que los magistrados declaren favorable un recurso de amparo interpuesto contra los firmantes del Convenio con la Universidad Católica, demando la suspensión del mismo. Se esperaba tener una reunión con el Presidente Zelaya, pero éste la aplazo so pretexto del estado de emergencia que vive el país.

 

Dada la emergencia que se ha presentado por las lluvias, para con el pueblo, los médicos de la facultad de ciencias medicas y los médicos internos, aunándose a la campaña de solidaridad conformaron brigadas de aproximadamente 40 médicos los que se han desplazado hacia la zona sur, en la capital y la zona norte, dejando temporalmente los plantones y desplazándose a las zonas de alto riesgo para brindar atención sin devengar ningún tipo de salario. Con esta iniciativa no han abandonado la lucha sino que han dispuesto darle un tiempo de espera en el servicio. También se han organizado en brigadas, para la recolección y repartición de víveres, ropa, y atención médica, aquí es donde se refleja el verdadero compromiso con el pueblo.

 

¿Qué pasa con la solidaridad?

 

A pesar de la importancia de la lucha de los médicos internos en contra del subsidio estatal a la Iglesia Católica, en detrimento de la educación y salud en beneficio de los pobres, hay muy poca solidaridad con los médicos internos. En el último periodo, se han producid luchas importantes, como los Paros Cívicos, la lucha de los fiscales y ahora la lucha de los médicos internos, pero el conjunto de la izquierda está ausente. Debido al ingreso de Honduras al ALBA, la mayor de los partidos de izquierda le ha claudicado al gobierno de Mel Zelaya, porque lo consideran “revolucionario”, “progresista”, cuando en realidad aplica medidas contra el pueblo. Por este motivo, no promueven luchas en su contra, y pos esta razón han dejado solos a los médicos internos.

 

La Coordinadora Nacional de Resistencia Popular (CNRP) que agrupa a las centrales sindicales y al movimiento popular, debe convocar a una jornada de solidaridad activa con los médicos internos, y si es preciso convocar a un paro nacional de 24 horas en contra del subsidio a la Iglesia Católica, por la defensa de la educación publica y la salud en beneficio de los pobres

 

Por esta razón, el Movimiento al Socialismo (MAS) de Honduras respalda la lucha de los médicos internos y exigimos que la CNRP y los demás partidos de izquierda apoyen la lucha por la Anulación del convenio Marco Cooperación entre la secretaria de salud y la Universidad Católica de Honduras, Garantizar que los bienes y recursos del estado asignados a la Secretaria de Salud no sean utilizados por instituciones privadas en ningún tiempo y bajo ninguna modalidad, por que este convenio firmado entre la secretaria y la UNICAH lesiona los intereses de los 8000 estudiantes de la Facultad de Ciencias Medicas de la UNAH.

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