Declaración del Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)

 

¡¡HONDURAS: Es hora de acabar con el bipartidismo!!

¡¡Por un gobierno del partido LIBRE y de las organizaciones obreras, campesinas y populares, sin representantes de la burguesía!!

¡¡En las elecciones del 24 de Noviembre: llamamos a votar críticamente por los candidatos luchadores del partido LIBRE!!

Cuatro años después del Golpe de Estado y de las fraudulentas elecciones de Noviembre del año 2009, se realizarán nuevas elecciones generales en Honduras. En esta ocasión, el panorama político es completamente diferente. Los últimos cuatro años han sido catastróficos. La situación actual es mucho peor que antes del Golpe de Estado: Honduras vive la peor crisis económica y social de su historia, el país literalmente se desintegra, sometiendo a las masas populares a una vorágine de desempleo, miseria y violencia incontenible.

 

La misión de Micheletti al encabezar el golpe de Estado era contener el descontento popular, y recomponer la crisis del bipartidismo. El objetivo lo logró a medias: evitaron la consulta de la Cuarta Urna y reafirmaron su control dictatorial sobre las instituciones del Estado, pero en ese momento no lograron detener la movilización de masas. Aunque los golpistas entregaron la banda presidencial a Porfirio Lobo y al Partido Nacional, para que concluyeran la tarea estratégica de recomponer la crisis del bipartidismo.

Por eso el discurso inicial de Porfirio Lobo fue moderado, llamando a la “reconciliación nacional”, incluso distanciándose de los golpistas. En esa fase, el gobierno de Lobo tuvo una política para engañar al movimiento de masas en resistencia. Estas poses “progresistas” tenían el principal objetivo de lograr la colaboración política de la conducción del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP). Esta nueva organizaciónfue, sin lugar a dudas, la principal conquista organizativa del pueblo hondureño, después de la gloriosa huelga bananera de 1954. Pero la conducción del FNRP no pasó la prueba de los acontecimientos, no tuvo una política independiente, y más bien terminó plegándose a la corriente del liberalismo disidente que encabezaba el expresidente Manuel Zelaya.

Las heroicas movilizaciones de la lucha contra el golpe de Estado, poco a poco, con represión y engaños, fueron amainando y terminaron atomizándose por la ausencia de una dirección auténticamente revolucionaria, que tuviera la autoridad y el prestigio político suficiente para canalizar el enorme descontento popular e imponer con métodos revolucionarios la convocatoria de la anhelada Asamblea Nacional Constituyente.

1.- El FNRP se transformó en el partido LIBRE y solo se mantiene esporádicamente como "brazo de movilización"

Los golpistas siempre mantuvieron al expresidente Zelaya como un rehén en el exilio, para obligar al FNRP a negociar y terminar aceptando la consumación del golpe de Estado. Este objetivo fue logrado por los golpistas. Dos años después, para frenar las luchas gremiales y sociales y contener el descontento popular, mientras aplicaba rigurosos planes de ajustes (desindexación de los salarios, estancamiento del salario mínimo, la ley de trabajo temporal, las reformas a institutos de previsión, eliminación de estatutos gremiales, etc.), en mayo del 2011 el gobierno de Porfirio Lobo consideró que había llegado el momento oportuno de negociar, cuando prevalecía el cansancio de las masas en resistencia, y suscribió con el expresidente Zelaya los Acuerdos de Cartagena que permitieron el regreso de éste a Honduras, y aceleraron la transformación del FNRP en un nuevo partido político: Libertad y Refundación (LIBRE).

Esta metamorfosis del FNRP no fue lineal ni sencilla. En la magna asamblea nacional del FNRP el 26 de Febrero de 2011, la mayoría de los delegadosse mostró contraria a convertir a esta organización en un partido político electorero. Hasta en ese momento Zelaya se encontraba en el exilio,no obstante, con su retorno el 28 de mayo del 2011, las corrientes que se oponían al giro electoral de la conducción del FNRP, como el Espacio Refundacional, ahora llamado Convergencia Refundacional, no fueron capaces de mantener la pelea interna y terminaron poco a poco, en su gran mayoría sumándose al proyecto de Libre.Utilizando el enorme prestigio político alcanzado en la lucha contra el golpe de Estado, el expresidente Zelaya terminó imponiendo su concepción sobre el nuevo partido LIBRE, que fue fundado finalmente en Octubre de 2011.

2.- Reformas al régimen político, para mantener el statu quo

Las movilizaciones contra el golpe de Estado sacudieron la conciencia de los trabajadores y sectores populares. Cada vez es más evidente que el régimen bipartidista está en crisis y ha arrastrado a Honduras al abismo de la barbarie del capitalismo en crisis. El pueblo exige, con justa razón, la realización de cambios profundos. Los pilares del bipartidismo conspiran para que estos sean cosméticos y se realicen manteniendo el statu quo de los grupos de poder.

Bajo la administración de Porfirio Lobo se han realizado algunas reformas al régimen político asentado en el bipartidismo, producto de la presión del descontento popular. Se reformó el articulo 5 de la Constitución, para permitir la realización de plebiscitos y referéndum, arrebatándole la bandera de la consulta popular al expresidente Manuel Zelaya.

Los diputados del Partido Nacional, el Partido Liberal y sus satélites aprobaron a inicios del 2013, otra reforma constitucional que instauró el “juicio político” contra el Presidente de la República, mecanismo que también permite destituir a magistrados y altos funcionarios de las instituciones del Estado. El Congreso Nacional ha asumido más funciones de control sobre la administración pública, debilitando la institución del Presidente de la Republica, en una aparente democratización del régimen político, pero en realidad no es así.

Con esta reforma, el bipartidismo en crisis ha creado un sofisticado mecanismo institucional que permitirá propinar nuevos golpes de Estado bajo la figura legal de la destitución ocasionada por medio del juicio político, no solo contra cualquier Presidente electo, sino contra cualquier funcionario que no se alinee con los grupos de poder.

Esta reforma fue aprobada a escasos 9 meses de las elecciones de Noviembre del 2013, teniendo como contexto el ascenso electoral del partido LIBRE y las reales posibilidades de que la candidata Xiomara Castro gane las próximas elecciones generales. Por esta razón, como una medida preventiva, el gobierno de Porfirio Lobo dejó el terreno minado y las trampas instaladas ante una posible victoria electoral de Partido LIBRE.

El boom electoral de LIBRE es un fenómeno político real, confirmado por las diferentes encuestas. La Constitución de Honduras y el actual sistema electoral, permite que cualquier candidato que obtenga mayoría simple de votos, así no refleje la voluntad de la mayoría del país, pueda conquistar la Presidencia de la Republica.

3.- Descontento social y polarización política

En estos últimos 4 años la crisis económica se ha agudizado a niveles nunca antes vistos. La crisis fiscal, que no permite siquiera pagar puntualmente a los empleados públicos(empleadospúblicos, maestros, médicos, enfermeras,policías,etc.), es apenas la punta del iceberg.

La crisis económica ha provocado contradictoriamente, por un lado, constantes luchas defensivas y dispersas de sectores de vanguardia delos trabajadores, pero, por el otro lado, también ha creado una desmoralización de las masas, una falta de confianza en sus propias fuerzas, y un desesperante sentimiento de lucha individual por la sobrevivencia económica. Una reducida vanguardia sindical de empleados públicos se ha mantenido en lucha contra viento y marea, por reivindicaciones tan elementales como el pago de los salarios atrasados, o contra la privatización de instituciones como HONDUTEL. En muchos casos, se ha perdido la perspectiva de salidas colectivas a través de la lucha y la movilización.

Este enorme malestar social ha producido el fenómeno político del ascenso vertiginoso del partido LIBRE. Al no poder librar luchas de manera constante, por efectos de la represión, desmoralización o simplemente por falta de una conducción revolucionaria, los trabajadores y demás sectores populares han acrecentado las ilusiones democráticas. A pesar de que el régimen bipartidista en crisis es una continuidad del golpe de Estado, que conserva su esencia antidemocrática, un importante sector de masas cree que la caótica situación de Honduras puede cambiar, incluso,   a través de las elecciones de Noviembre de este año.

Estas ilusiones democráticas se han fortalecido por el simple hecho de que el expresidente Manuel Zelaya regresó al país, y ha podido organizar sin mayores tropiezos el nuevo partido LIBRE.

Entonces, en la actual campaña electoral tenemos, una gran polarización política entre el gobernante Partido Nacional, que busca desesperadamente conservar el gobierno, y la emergencia del partido LIBRE, como una expresión de estas ilusiones democráticas de las masas. El Partido Nacional ha logrado desde el gobierno fortalecer su base social clientelista, con el uso discrecional de los programas asistenciales (como el Bono 10,000 y otros), sobre el campesinado pobre y algunos sectores de la clase media urbana. El Partido LIBRE, en cambio, agrupa a la mayoría del movimiento sindical, popular y campesino e indígena, a sectores de la clase media y de la intelectualidad, incluida casi la totalidad de las organizaciones de izquierda. Las encuestas ubican la pelea por el gobierno entre el Partido Nacional y LIBRE.

4.- ¿Qué representa el partido LIBRE?

Con la creación de LIBRE se consolidó la orientación de la conducción del FNRP de entrar al terreno electoral. Sin lugar a dudas, el surgimiento del nuevo partido LIBRE refleja un proceso contradictorio. Los partidos políticos deben analizarse en base a tres criterios básicos: composición social, naturaleza de clase de su dirección, programa y política.

Por su composición social, el partido LIBRE, al provenir del FNRP, refleja una amplia base popular, en que participan activamente las centrales obreras, sindicatos, colegios magisteriales, y el llamado “movimiento popular”, pero también participan ex miembros de otros partidos, principalmente del Partido Liberal y la UD, etc. No obstante, dentro de ese amplio conglomerado social, en el último periodo, especialmente después del giro electoral del FNRP, observamos una creciente participación de sectores de clase media, en todos sus estratos, de políticos tradicionales tránsfugas, que miran asombrados la gran oportunidad de obtener cargos y puestos públicos.

Pero los partidos no se definen obreros ni populares, única y exclusivamente por la composición social. En general, todos los partidos burgueses, en cualquiera de sus variantes, tienen en mayor o menor grado, a sectores obreros, populares y campesinos como base social, como electorado cautivo.

Lo que define la naturaleza de clase de un partido político, no es pues solo la base social, sino cuáles son sus objetivos fundamentales. En el caso del partido LIBRE, sin caer en esquematismos, no hay duda que refleja una enorme contradicción social: una base obrera, popular y campesina, con una conducción que refleja los intereses de un reducido grupo de empresariosque siempre han rodeado al ex presidente Manuel Zelaya y que en su mayoría provienen del Partido Liberal.

Aunque por su composición social el partido LIBRE está enraizado en los sectores obreros y populares, por su Declaración de Principios, su Programa de Acción Política, la naturaleza de clase de su actual conducción, así como por su defensa cerrada y apologética de la democracia burguesa formales, es un partido liberal con ideología radical.

LIBRE refleja dramáticamente esa contradicción entre su base social y el carácter burgués de su conducción y programa políticos. La presencia de la izquierda, y de muchos dirigentes sindicales en su seno, ha contribuido a acentuar esta enorme contradicción.

La izquierda hondureña nunca ha tenido representación ni participación propia, independiente. La represión de los gobiernos nacionalistas y de las dictaduras militares obligó a la izquierda a refugiarse en el movimiento popular. Y en este terreno siempre ha tenido la competencia de las distintas corrientes del Partido Liberal, especialmente de sus alas de izquierda. El partido LIBRE logró absorber al conjunto de la izquierda, neutralizándola.

A pesar de su programa democrático burgués, de sus posiciones abiertamente conciliadoras con los empresarios del COHEP y otros grupos similares, la conducción del partido LIBRE no goza de la confianza de los grupos de poder. Al ex presidente Zelaya no le perdonan sus veleidades populistas y el hecho de haber acelerado, con la frustrada consulta de la Cuarta Urna, la crisis del sistema bipartidista.

Ante las posibilidades reales de que Libre gane las elecciones, los medios de comunicación -que defendieron el golpe de estado y la permanente violación a los derechos humanos- han arreciado nuevamente una campaña en contra de la candidata Xiomara Castro y de Libre.

5.- La negativa a reeditar la experiencia de la CIP

Conscientes de que tarde o temprano la lucha por la Asamblea Nacional Constituyente se libraría en las urnas, en 2012 los socialistas centroamericanos planteamos la urgente necesidad de reeditar la experiencia electoral de la Candidatura Independiente Popular (CIP) que encabezó Carlos H. Reyes en el 2009, en representación de diversos sindicatos y organismos populares, campesinos e indígenas. Nuestra propuesta no fue secundada por ninguna organización dentro del Espacio Refundacional, ahora Convergencia Refundacional, y simplemente cayó en el vacío. Ciertos sectores de la izquierdadentro del Espacio Refundacional, a nivel de organización o a título individual, decidieron apostar al nuevo partido LIBRE, el resto de las organizaciones simplemente ignoraron la propuesta del Partido Socialista Centroamericano (PSOCA).

El Tribunal Supremo Electoral (TSE), aplicando el libreto de la supuesta democratización del sistema electoral, ha autorizado la participación de algunas candidaturas independientes en el actual proceso electoral, unas más marginales que otras, pero en realidad ninguna de ellas refleja el fenómeno político y social que representó en su momento la CIP, tal como propusimos en su oportunidad.

6.- ¡¡Por un gobierno del partido LIBRE y de las organizaciones obreras, campesinas y populares, sin representantes de la burguesía!!

Existe un fuerte sentimiento entre la mayoría de la población de que un gobierno del partido LIBRE podría cambiar la caótica situación de Honduras. Estas progresivas ilusiones democráticas se reflejan en las encuestas que colocan a Xiomara Castro, candidata presidencial de LIBRE, como la virtual ganadoras de las próximas elecciones.

Pero el discurso de la candidata Xiomara Castro no se caracteriza por ser revolucionario sino extremadamente conciliador con los empresarios, al grado que la empresaria Juliette Handal ha sido nominada como una de las designadas (vicepresidenta) de la fórmula presidencial por el partido LIBRE. Este discurso conciliador de la cúpula de LIBRE choca con las aspiraciones democráticas de las masas.

Ninguno de los postulados del programa democrático burgués de LIBRE podrá aplicarse en un gobierno de alianzas con la sombra de la burguesía, porque está siempre intentará revertir al más mínimo cambio que atente contra sus intereses.

Por ello, el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) coincide en la necesidad de sacar del gobierno al Partido Nacional, el pilar más fuerte del bipartidismo, para instaurar un gobierno del Partido LIBRE y de las organizaciones obreras, campesinas y populares, pero sin representantes de la burguesía.

7. Llamamos a votar críticamente por las candidaturas a diputados luchadores de LIBRE.

En las pasadas elecciones internas de noviembre del 2012, llamamos únicamente a votar críticamente por los candidatos que representaban a los sectores obreros y populares en las listas del partido LIBRE. El resultado de las elecciones internas confirmó nuestro análisis de que la mayoría de las masas continúan viendo y sintiendo al partido LIBRE como una continuidad de la lucha contra el golpe de Estado, a pesar del programa democrático burgués, y del discurso y la política conciliadora de su dirección.

En las próximas elecciones del 24 de noviembre del año en curso, el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA), llama a votar críticamente por los candidatos a diputados, alcaldes y regidores del partido LIBRE.

La lucha fundamental en las próximas elecciones, no es la presidencia de la república, sino desmantelar al régimen bipartidista en crisis, utilizando los mecanismos electorales que el mismo ha creado. Como hemos explicado con anterioridad, la lucha por obtener mayoría dentro del Congreso Nacional ha pasado a convertirse en algo vital y decisivo, ya que desde ahí se puede destituir a través del “juicio político” al Presidente de la República, así como convocar, en los actuales marcos de la antidemocrática Constitución de 1982, a una Asamblea Nacional Constituyente.

Nuestra crítica al partido LIBRE obedece, entre otros aspectos, a que su programa liberal, democrático burgués, no conduce a fortalecer la lucha por la instauración de la Asamblea Nacional Constituyente, que reorganice a Honduras en beneficio de los trabajadores y los pobres, sino que aspira a gobernar en las condiciones que han creado los golpistas. Pero ante la necesidad de derrocar las bases del bipartidismo y de socavar el excluyente modelo político, instaurado por la Constitución de 1982, para las elecciones generales de noviembre de 2013 llamamos a votar críticamente por las candidaturas de luchadores del Partido Libre.

Centroamérica, 8 de Octubre del 2103

Secretariado Centroamericano (SECA)

Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)

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