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NOTAS PARA UN BALANCE DE LA HUELGA DE APSE

Este artículo es una síntesis de un documento mucho más amplio elaborado por el Grupo Reflexión Docente (GRD) de Costa Rica. El Resumen es responsabilidad de la redación de EL SOCIALISTA CENTROAMERICANO.

Las y los educadores de secundaria estuvimos en huelga desde el día lunes 31 de marzo hasta el jueves 24 de abril, es decir, 18 días hábiles si excluimos el feriado del viernes 11 que se disfrutó el lunes 14. Esta huelga, –a diferencia de la del año 2003 no tuvo la incorporación de toda primaria, mucho menos de otros sectores– estuvo aislada debido a que, el nivel de lucha y movilización, después de la derrota política-electoral del referendo sobre el TLC en octubre del 2007, ha disminuido drásticamente.

 

Sin embargo, esta huelga tuvo una gran fortaleza: la incorporación masiva de los docentes de secundaria, así como un alto nivel de movilización en todo el territorio nacional. Estos elementos, así como los justos objetivos de la huelga, evitaron que el gobierno y el Ministerio de Educación Pública (MEP) derrotaran este movimiento huelguístico, tratando de cansarlo y “negociando” migajas en medio de la huelga con las dirigencias pro-patronales y traidoras de la ANDE, SEC y el SINAPRO.

Marco Político Nacional de la Huelga de APSE

El gobierno de los hermanos Arias, la oligarquía criolla y de las transnacionales imperialistas tuvieron una victoria política al haberse aprobado en el referendo el TLC, así como estar aprobando en la Asamblea Legislativa, –con la colaboración del PAC– aunque sea lentamente las leyes de implementación de ese tratado comercial y político.

El proceso de movilización y de lucha, venía disminuyendo no solo desde el año 2007 sino que desde el año 2006. El XIII Informe Estado de la Nación lo registra así: “Entre 2000 y 2005 se registró un total de 2.993 acciones colectivas, es decir, 428 en promedio por año, mientras que en 2006 se contabilizaron 312 (...) en 2006 nuevamente los trabajadores fueron los actores que protagonizaron la mayor cantidad de acciones colectivas: 150, equivalentes a un 48%... la declaración pública fue el principal recurso que utilizaron los distintos actores para manifestarse. Esta categoría las declaraciones a medios de comunicación, conferencias de prensa, boletines, manifiestos públicos y peticiones por escrito reportados por los medios de comunicación, De las 312 acciones colectivas 34% comprendió a esta categoría. El segundo tipo de acción de importancia fue el bloqueo, pues se suscitaron 34 en total (11%)”[1].

Esta desmoralización del movimiento de masas, así como de su vanguardia, se manifestó en las raquíticas movilizaciones contra esa agenda y la huelga del ICE a finales de año 2007, en la que sólo pararon unos 500 trabajadores de los 20 mil empleados que tiene esa institución, es decir, el 2,5%.

La derrota del NO en el referendo cierra la situación y la dinámica de la lucha de clases abierta desde el combo del ICE del año 2000. Se abrió una nueva situación que se caracteriza como de retroceso y reflujo de la movilización y de la lucha en el movimiento de masas de conjunto.

La Huelga: Inicio, Objetivos y Características

El movimiento del percentil 25 al 30 para los profesionales del gobierno central representó un incremento salarial del 14% a la base, que en promedio significó un aumento de los salarios de 75.000 colones, a partir del mes de enero del 2008.

La huelga de los docentes de secundaria se había votado desde el mes de diciembre del año 2007. Se formó un comité nacional de huelga que se reunió permanentemente en el mes de enero para planificar todo el proceso huelguístico, desde las demandas hasta diversos aspectos organizativos y logísticos. Sin embargo, fue a finales del mes de febrero que se realizó una Asamblea de Presidentes de Base de APSE en la que se decidió iniciar la huelga nacional el día lunes 31 de marzo. Previo a la huelga se produjeron dos movilizaciones con una participación mediana de educadores que se dirigieron al Ministerio de Educación Pública y el Ministerio de Hacienda, para entregar el pliego de demandas, pero en ambos casos las puertas de esa institución fueron cerradas.

Las demandas de la huelga eran las siguientes: pago oportuno y completo del salario; equiparación salarial con profesionales del gobierno central; aplicación del concurso docente del año 2007; aumento salarial para el sector no profesional de educación; disminución del número de alumnos por sección y otras. En el proceso huelguístico se agregó la demanda de que el aumento de salario por efecto de la equiparación salarial fuera retroactivo al mes de enero, tal como fue concedida a los profesionales del gobierno central.

En primer lugar, la huelga en general comenzó débil, es decir, con poca participación tanto en el sector urbano como rural, aunque en el área rural el nivel de participación era más grande que en el centro. Este hecho se debía a que una gran cantidad de docentes que se encontraban trabajando en los primeros días de la huelga, estaban desinformados y no conocían las razones del movimiento huelguístico. Este fue el primer gran error del directorio de APSE, no haber garantizado que las bases de la organización en todo el territorio nacional estuvieran informadas y clarificadas de la huelga y sus objetivos. No obstante ese error de la dirección de la huelga, los y las educadores en huelga formaron comisiones que visitaron en la primera semana de la huelga a todos los colegios que se encontraban trabajando normalmente. Las bases en huelga, trabajando en comisiones, garantizaron asambleas y reuniones con los docentes que impartían lecciones e inmediatamente se incorporaran al movimiento huelguístico. Este trabajo fue exitoso, ya que garantizó una participación masiva de los docentes a la huelga.

En segundo lugar, la movilización permanente de los educadores durante el proceso huelguístico, léase visitas a colegios y escuelas, marchas regionales, marchas lentas (tortuguismo), concentraciones, marchas nacionales, discusiones y polémicas con los burócratas y traidores sindicales del directorio de la ANDE y el SEC, permitieron una alta y sostenida participación de los docentes en el movimiento huelguístico.

En tercer lugar, la alta y sostenida participación de los docentes en el movimiento huelguístico, que constituye todo un fenómeno político y sindical, también se explica por las justas demandas de la huelga, así como porque la lucha por la equiparación salarial de los educadores con respecto a los demás profesionales del gobierno central, en el fondo, es una lucha por aumentos salariales, independientes de los ajustes semestrales por inflación, que compensaría el alto incremento, continúo y generalizado costo de vida, el endeudamiento permanente de los educadores que nos ahoga económicamente, no permitiendo realizar proyectos personales.

En cuarto lugar, la política del gobierno de excluirnos, marginarnos y segregarnos de la revaloración salarial que le había otorgado a los profesionales del gobierno central fue un elemento clave, que motivó la indignación, la disposición a la lucha y la resistencia dura y permanente de los docentes en contra del gobierno y del MEP.

En quinto lugar, en cierta medida, la resistencia del movimiento huelguístico de los educadores de secundaria se explica por la experiencia política y organizativa adquirida por los docentes durante el proceso de lucha en contra del TLC.

Propuestas y Contrapropuestas, Bases y Dirección

Sin duda alguna, una característica central que caracterizó a la huelga de secundaria fue que permanentemente las bases rebasaron al directorio de la APSE, logrando una masiva participación de los docentes de secundaria, rechazando dos propuestas del gobierno, la primera del 15 abril por mayoría absoluta, ya que las 30 regionales la rechazaron y, la segunda, del 21 de abril, que fue rechazada por 28 regionales.

Las propuestas presentadas y elaboradas por el ministro de educación, Leonardo Garnier, eran las mismas que habían firmado los dirigentes traidores de la ANDE y el SEC el 8 de abril, con la excepción de que tenía fechas y aceptación de hacer retroactivo a partir del 1 de septiembre el reconocimiento salarial, ya que se crearon ilusiones, tanto en educadores como en la opinión pública, de que el conflicto se había resuelto favorablemente para los docentes.

Sobre el tema del aumento salarial para el sector no profesional, quedaban siempre en el aire y en las buenas intenciones, ya que solo se plantea dar seguimiento a un estudio de revisión salarial, pero en el cual no hay un compromiso de pago real del incremento salarial.


[1] Décimo tercer Informe Estado de la Nación en Desarrollo Humano Sostenible. San José C.R. Noviembre del 2007, páginas 321-322.

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