A fortalecer la Coordinadora Cívica Nacional

El paro nacional del sector salud contra el Proyecto de Ley 349, mal llamado de “Asociación Público Privada” (o privatización total del sector público), convocado por los gremios médicos de COMENENAL, los administrativos de la CSS como ANFACSS, AECSS, ANADETRAM, CONAGEPROTSA y la Asociación de Empleados de MINSALUD, ha sido un ÉXITO. El gobierno se ha comprometido a retirar el proyecto de la Asamblea Nacional en las próximas sesiones extraordinarias.

Esta es la tercera derrota consecutiva del gobierno de Martinelli y sus medidas neoliberales, demostrándose una vez más que la lucha sí da victorias al campo popular. Anteriormente los trabajadores de Changuinola, a costa de un sacrificio de vidas y apoyados por una huelga general, derrotaron la Ley Chorizo, en julio de 2010. En febrero de este año, el pueblo gnobe-buglé, apoyado por las organizaciones populares y grupos ambientalistas, logró derrotar en las calles el Código Minero.

El éxito de la lucha contra el Proyecto 349 no es sólo del sector salud, sino del conjunto del movimiento popular panameño que se agrupó en torno a un nuevo organismo, la Coordinadora Cívica Nacional. La nueva Coordinadora logró concitar la unidad de la organizaciones populares en el momento justo en que el gobierno maniobró tratando de dividir a los gremios médicos. La Coordinadora Cívica Nacional fue la que convocó e hizo posible la movilización más grande que ha habido en 2 años y medio de gobierno de Martinelli, el pasado 16 de Noviembre.

Desde el Movimiento Popular Unificado (MPU) saludamos la victoria de los gremios de la salud y de la Coordinadora Cívica Nacional. Sin embargo alertamos ante el hecho de que, frente al gobierno empresarial de Martinelli-CD, no cabe la menor confianza, ya que reiteradamente ha faltado a su palabra y vuelve a intentar imponer sus medidas ante cualquier descuido, como ahora hace con el Código Minero.

El proyecto 349 es privatizador y negativo para el país por donde se le mire. Por ello no basta con retirar las alusiones al sector salud y educación, sino que es preciso exigir su derogación completa. Tampoco vale caer en diálogos tramposos que busquen imponernos de manera solapada lo que ha sido rechazado en la lucha y en las calles, mucho menos a través de mecanismos manipulados como la “Concertación”.

Debemos sostener y fortalecer la Coordinara Cívica Nacional como el organismo realmente unitario que el momento demanda: tanto para enfrentar nuevos ataques del gobierno contra los derechos económicos y sociales del pueblo panameño; como intentar revertir medidas antipopulares vigentes (como las alzas de precio constantes, la necesidad de un aumento general de salarios, etc.).

La Coordinadora, si se mantiene amplia y democrática,  es el ente desde el cual podría surgir con fuerza una alternativa política independiente y popular que levante un programa de transformaciones para construir  un país distinto en el que sí impere la democracia participativa y la justicia social.

Panamá, 19 de noviembre de 2011.

Movimiento Popular Unificado (MPU)