Isaac Bravo Jaen, presidente de UNEN, se baja de su lujosa camioneta doble cabina

Por Diego Lynch

La Unión Nacional de Estudiantes Universitarios (UNEN), la cual aglutina a los dirigentes estudiantiles de todas aquellas universidades que son beneficiadas con el seis por ciento (6%) del presupuesto del gobierno, ha sido durante muchos años un bastión y semillero del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN). Muchos de sus dirigentes ocupan en la actualidad cargos públicos, esto como recompensa de la fidelidad y servilismo que demostraron a Daniel Ortega cuando el Frente no estaba en el poder.

Tras el retorno a la presidencia del Frente Sandinista, los movimientos estudiantiles se han desarticulado, ya no hay protestas estudiantiles ni plantones en contra de las políticas burguesas que aplica el gobierno; esto a causa de que los mal llamados dirigentes aspiran a ocupar en un futuro cargos públicos y se mantienen fieles al partido de gobierno.

Piñata con presupuesto

A través de los años se ha criticado la forma en que se mal gasta el presupuesto para las universidades, parte del cual se reparten en beneficios y lujos los dirigentes estudiantiles, dejando a un lado las necesidades del estudiantado y convirtiendo a la UNEN en un trabajo y modus vivendi de jóvenes que jamás terminan sus carreras para continuar ordeñando el seis por ciento.

Por ejemplo, hace unos años, de forma anónima, por temor a represalias administrativas, los estudiantes de la carrera de geología de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, UNAN-Managua, expresaron su descontento con las medidas contradictorias que ejecutan los directivos de esa universidad, quienes aduciendo austeridad cancelaron el presupuesto destinado a las giras de campo, mientras, por otra parte, destinan al menos 18 mil córdobas a las fiestas que realiza la UNEN los viernes y los jueves, manifestaron ayer los mismos universitarios “...El martes pasado, al menos 30 estudiantes de geología obstaculizaron el tráfico vehicular de la avenida principal de la UNAN, como forma de protesta por la cancelación del presupuesto para las excursiones de campo que por la naturaleza de la carrera son necesarias” (Archivo: El Nuevo Diario; 26 de Septiembre del 2009).

Casos como estos se viven año con año dentro de las Universidades, desprestigiando al movimiento estudiantil, causando inconformidad en las bases y desconfianza en los supuestos representantes, quienes se roban el presupuesto y se venden a las peticiones del gobierno Sandinista.

Legalizan robo

Ante el sinnúmero de críticas y a raíz del desprestigio que vive la Unión de Estudiantes y sus dirigentes, el Frente Sandinista ha pretendido legalizar los robos y malos manejos con un salario ilegal y absurdo para el presidente de la UNEN.

El actual presidente de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), Isaac Bravo Jaen, tiene 36 años de edad y desde el 2004 empezó a ocupar diferentes puestos dentro de la dirigencia estudiantil. A veces dice que cursa tercer año de Ingeniería en Sistemas y otras asegura que está en segundo de Ingeniería en Computación “…Estos cambios de carrera le han permitido permanecer en la dirigencia estudiantil durante diez años y, desde enero pasado, devengar un salario fijo mensual de 18,000 córdobas por “representar” a los estudiantes de las universidades beneficiadas con el 6% constitucional…Su salario es incluso mayor al de un profesor universitario con más de cinco años de experiencia y tres años de antigüedad que ronda los 12,000 córdobas, según la tabla salarial que maneja el sindicato Américo Tapia, de la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli)” (La Prensa; 27 de Marzo del 2014).

 

Transparencia e Independencia Estudiantil

 Ante esta nueva disposición del gobierno del Frente Sandinista y de las Autoridades Estudiantiles, el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) denuncia este abuso y robo a los estudiantes universitarios, el presupuesto que se otorga a las universidades es para las necesidades de aquellos jóvenes que no poseen las facultades económicas necesarias para estudiar y culminar sus carreras, ya sean becas, fotocopias, alimentación, entre otras.

Al otorgar un salario al presidente de UNEN se disminuyen las ayudas a los estudiantes y deja de ser un dirigente estudiantil pasando a ser un trabajador del gobierno y de la burocracia que a través de los años ha ordeñado el presupuesto. Hacemos un llamado a todas las bases estudiantiles a exigir la renuncia inmediata de Isaac Bravo; hay que convocar a nuevas elecciones estudiantiles transparentes e independientes de la influencia del partido de gobierno, a quien le exigimos no influir más en la toma de decisiones de los estudiantes universitarios. Que no se den salarios ni prebendas a los dirigentes y que se represente dignamente al estudiantado, velando por sus derechos e intereses como colectivo y no de manera individual.