Por Sebastián Ernesto González

Candente se ha puesto el tema del costo de la energía eléctrica en el país, a tal punto que los funcionarios del gobierno actual han declarado que la deuda que se tiene con las empresas térmicas es impagable. Para nadie es desconocido los contratos leoninos de las generadoras de energía eléctrica con el Estado, pero, además, mes a mes esquilman los bolsillos de los ciudadanos con los aumentos desorbitantes que a cualquiera lo orillan al borde de un profundo abismo.

El conflicto entre el Estado y la térmica se acrecentó a raíz de una carta amenazante que la generadora de energía envió al Secretario de Energía La empresa generadora de energía térmica Luz y Fuerza de San Lorenzo (Lufussa) amenazó este jueves con suspender parcialmente, a partir de mayo, el servicio de suministro eléctrico a Honduras, como medida para exigir a la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) el pago de casi 185 millones de lempiras”.

“La advertencia de Lufussa fue denunciada por el secretario de Energía, Erick Tejada, a través de Twitter, en donde adjuntó el documento que remitió la térmica al gobierno y a esa institución”. “Según la compañía térmica los montos que le adeuda la ENEE aumentaron a un 13.24 por ciento…”.   Tunota(28/04/22).

La carta amenazante enviada por la empresa LUFUSSA motivó a que Erick Tejada respondiera “No vamos a sentarnos en la mesa a renegociar contratos con una pistola en la cabeza”. AB (28/04/22).

Injerencia de embajadora gringa

El grupo de empresarios dueños de las térmicas es el que más apoyó el golpe de Estado del 2009, son los mismos dueños de medios de comunicación que apoyaron y encumbraron a Juan Orlando Hernández en el poder, son los mismos dueños de varios bancos que se mencionan en negocios sucios con el “juanorlandismo”. Los contratos abusivos y escandalosos con el Estado fueron maliciosamente renovados una y otra vez en los últimos 12 años.

El conflicto sobre la energía ha motivado al Congreso Nacional para discutir un proyecto de “Decreto de la Ley Especial para Garantizar el Servicio de la Energía Eléctrica como un Bien Público y un Derecho Humano de Naturaleza Económica y Social”.

Esta iniciativa de Ley ha hecho explotar a los voraces empresarios  que han acudido rápidamente a reunirse con la embajadora de USA. El día martes 3 de mayo la embajadora estadounidense a escrito en su cuenta de Twitter “La reforma energética es crítica para el desarrollo económico… como escrito nos preocupa el efecto que tendrá sobre la inversión extranjera…”.

La respuesta del canciller de la República, Enrique Reina no se hizo esperar, respondiendo “…Nos preocupa su desacertada opinión sobre política interna, la que no contribuye a las buenas relacionas con EEUU”.

El intercambio entre los diplomáticos ha estremecido la mente de todos los hondureños y nuevamente nos recuerda el papel de la embajada en el 2009.

Hay que convocar al pueblo a las calles

Si la empresa privada no es confiable, tampoco lo es la embajada de EEUU, por lo anterior, llena de preocupación las manifestaciones públicas de la embajadora Laura F. Dogu y sus reuniones con la empresa privada y Fiscal Oscar Chinchilla, íntimo amigo del ahora preso en New York, Juan Orlando Hernández.

Ya en el 2009 tuvimos la mano peluda del imperio, orquestadora del golpe de Estado que nos castigó con 12 años de una dictadura corrupta y sanguinaria. La lección aprendida es que el pueblo debe hacerse respetar, para ello es imperativo salir a las calles a exigir la nacionalización del servicio de la energía eléctrica, esta no puede seguir en manos de un grupito de avorazados empresarios que pretenden ordeñar las finanzas públicas de manera eterna.

Los contratos onerosos deben anularse, la generación y distribución del servicio de la energía eléctrica  debe nacionalizarse y pasar a control de los trabajadores. La inflación va en aumento por el precio del combustible, los productores de leche también están presionando para un aumento que encarecerá todos los lácteos. Pareciera que todo es una conspiración de los empresarios ligados a la estructura de poder de la dictadura para generar las condiciones que desestabilicen al gobierno de doña Xiomara.

Ante el peligro inminente de la ambición empresarial, ante la injerencia de EEUU, ante una estructura política corrupta, al pueblo no le queda más alternativa que organizarse y defenderse en las calles de las pretensiones de empresarios corruptos. Desde ya mueven las piezas para crear las condiciones de anarquía, que les permita a la primera oportunidad instalar un nuevo JOH.