Por Ixchel Zambrano

La carrera de filosofía la constituyen escasos estudiantes activos, lo que, en sentido práctico, no resultaría un problema realizar un llamado a la organización. En los intentos por conformar una organización estudiantil en la carrera, en años recientes se ha visualizado prácticas que serían muy reprochables desde las materias del pensum como Política, Teoría del poder y el Estado, abarcando también las de Ética. Se violan conceptos claves como la democracia, libertad de expresión, autonomía y se realzan otros como el nepotismo, verticalismo e ilegitimidad.

El martes 10 de septiembre de 2019 un grupo de estudiantes de filosofía decidieron protestar contra todas las prácticas antes mencionadas, colocando carteles exigiendo una asamblea después de dos meses de espera; en las últimas asambleas se solicitaba de manera urgente una nueva Junta Directiva (JD), y con esto, a su vez, denunciaban la falsa representación en el MEU, debido a que la JD se ha declarado disfuncional. En la anterior asamblea también se nombró una Comisión de Redacción de Estatutos (CRE) para derogar artículos lesivos que no permitían una verdadera participación e inclusión de todas y todos en la AEF.

El CRE tuvo la iniciativa de convocar a una Asamblea el día jueves 1 de agosto del presente año. Asamblea que el mismo “presidente” de la extinta JD, procedió a boicotear; desde esa fecha no han existido los esfuerzos por convocar a una reunión asamblearia, y convenientemente, se ha llamado al silencio. Ya desde el 2016 se ha hecho notorio este accionar propio de la caduca JD: cuando se nombraban como “Movimiento Refundación Estudiantil Filosofía” (MREF), gestaron un golpe en la asamblea de estudiantes —los estudiantes de filosofía habían asumido un proceso de organización en el 2015, en ese momento a la junta directiva le correspondía un plazo del 2015-2017, interrumpido por dicho movimiento— y buscarían nombrarse como JD (2016-2018), a su vez introduciendo nuevos Estatutos y Reglamentos de corte exclusivo y vertical.

Esta ha sido una de las razones que contribuyen a la apatía generalizada de los estudiantes. Para muestra de ello, tan solo hay que prestar atención a los Estatutos impuestos por este movimiento, donde en un artículo se estipulaba que, para ser miembro de la asociación, debía pagarse una membresía (artículo 5 que se logró reformar en la asamblea del 18 de julio de este año). En el “artículo 20”, se le asigna muchas atribuciones al presidente para decidir por toda la Asociación, lo que denota el verticalismo de la nueva estructura de la AEF propuesta por el MREF.

La disfuncionalidad de la JD se manifestó en la asamblea del 18 de junio de este año dando como producto la siguiente votación: Mantener la junta directiva actual= 0 votos; seleccionar una nueva junta directiva provisional= 21 votos; y esperar a Elecciones generales=0 votos. Por unanimidad se vio la necesidad de una legítima representación de la AEF. (Véase acta de la asamblea del 18 de junio de 2019)

La última asamblea en filosofía se realizó el 18 de julio de 2019, teniendo como puntos de agenda la reforma de Estatutos y Elección de un Comité Electoral, debido a que en la asamblea anterior (18/junio/2019) se concordó en la necesidad de una nueva junta directiva por la falta de una genuina representación. Aunado a esto, la expiración del plazo de la inoperante JD que excedió el tiempo que sus mismos Estatutos y Reglamentos contemplaban para cierto periodo (2 años).

En el transcurso de los dos años fueron pocas asambleas realizadas, tanto que no dudaron en irrespetar el tiempo de gobernanza y actualmente el “presidente” Efraín Ordoñez, con su indisposición en convocar a asamblea y boicotear las que se proponen, pretende vender la imagen de ser el único capaz de representar a los estudiantes de filosofía. Debido a esto es que se presentan votos desde esta carrera, en espacios como el MEU, y con autoridades universitarias, como lo es para el “Encuentro Nacional”, éste último solicitado al rector como “asociación” (véase el OFICIO RU-638-2019 del 22 de agosto de 2019). Sin embargo, no se han realizado asambleas en filosofía informando y consultando la aprobación de participar en dicho evento. En este momento la principal crítica es su desidia por organizar la AEF, y asistir a espacios sin previa consulta de la asamblea, así como la toma de decisiones de manera unilateral.

Por consiguiente, a falta de una verdadera representación, decisiones arbitrarias y la no alternancia en los puestos, así como a la inactividad en general en que se encuentra sumida la AEF, se ha alzado un descontento en las y los estudiantes, que continuarán exigiendo una Asamblea de Estudiantes que demande un llamado a elecciones para construir legitimidad en la AEF.

Compartir la experiencia en Filosofía puede contribuir a otras asocias para evitar el verticalismo manifestado en el exceso de atribuciones a la figura de presidente que sobrepasa la voluntad de la asamblea; dando como resultado un “representante” sin representados. Esto ha sido una de las razones por las que no se permite nuevos liderazgos que asuman el espacio de la Asociación de Estudiantes.

Parte de la desarticulación que padece el MEU es debido a este tipo de dinámicas, debemos apostarle a una verdadera organización de las Asocias que son los pilares del movimiento estudiantil. Regresar al espíritu de “Asocias al Poder” y no enfocarse solamente en las Elecciones Generales y en un “Encuentro Nacional” que promete ser un fracaso, debido a que no se ha realizado antes un Encuentro que nos cohesione como Comunidad Universitaria. Para construir auténtica democracia en la UNAH hay que comenzar en nuestros espacios más inmediatos, como lo son nuestras asocias.