Por Ricardo Velásquez 

El Fondo Monetario Internacional (FMI) recién ha terminado la revisión de la macro economía hondureña y ha aprobado las políticas económicas impuestas por el régimen de Juan Orlando Hernández, políticas de miseria que han golpeado fuertemente la economía de las familias de los trabajadores.

Para Wilfredo Cerrato, secretario de Finanzas y coordinador del Gabinete Económico, “el tema de sostenibilidad del acuerdo (con el FMI) es un tema de convencimiento que tenemos como equipo del Gabinete Económico”. Agrega que están claros de trabajar en temas como la disciplina fiscal, la inversión pública, el crédito público y el control del gasto. Cerrato sostiene que la Ley de Responsabilidad Fiscal obliga al gobierno a mantener la disciplina en las finanzas públicas. EH (15/06/2016)

Cada vez que uno de los miembros del gabinete económico habla de disciplina fiscal, no hace más que dar a entender que no hay aumentos para los empleados públicos ni gremios.

Dirigencia juega con Dios y con el Diablo

Hay que señalar que en los años 2010 y 2011 no hubo aumentos salariales y fue en julio de 2012 que se efectuó el último ajuste salarial a los empleados públicos que consistió en 900 lempiras (40 $) mensuales para cada trabajador, la dirigencia obrera se ha preocupado más por apoyar la gobernabilidad del régimen post golpista que en realizar una verdadera lucha para lograr mejores beneficios para los trabajadores. De esta forma han establecido acuerdos ridículos en lo que respecta al aumento del salario mínimo.

Todos los sindicatos del sector público pertenecen a una de las Centrales Obreras, sin embargo, mientras los servicios públicos se han encarecido enormemente, la moneda devaluada y la canasta básica por las nubes, la dirigencia de las Centrales Obreras no ha tenido ni la mínima intención de movilizar a los trabajadores para exigir un reajuste salarial que le devuelva un poco de vida digna a las familias.

Este año no se queda atrás, a inicios del año el gobierno prometió revisar en el mes de mayo los índices macro económicos para analizar la factibilidad de un aumento salarial, sin embargo, ya estamos en las últimas semanas de junio y no hay indicios de que el gobierno de JOH pretenda dar un aumento, ni siquiera presupuestaron un posible aumento para el 2016.

Los representantes de los empleados públicos están exigiendo un reajuste salarial de 3,000 (134 $) lempiras que le solicitan al gobierno y esperan que el 21 de junio se les otorgue una propuesta oficial para que ambos sectores lleguen a un acuerdo. En tal sentido, el presidente del Sindicato de Trabajadores de la Medicina y Similares (Sitramedys), Miguel Mejía declaró que "el gobierno nos va a llevar una propuesta el próximo 21 de junio, la cual esperamos que así sea para evitar una conflictividad en el sector público del país". EH (15/06/2016). Este aumento estaría pidiéndose diferido en dos años, según la dirigencia dada la negatividad del gobierno en otorgarlo.

El papel de las dirigencias obreras se ha reducido a firmar acuerdos por el salario mínimo que siempre son ridículos para la golpeada economía se los asalariados. El firmado a inicios de este año osciló entre el 5.5% y el 8%, según sea la actividad económica y el personal de cada empresa. Los porcentajes se traducen a cifras que van desde los 13.13 $ a 31.11 $ al mes.

Los empleados públicos y gremios deben movilizarse para exigir un reajuste

Si el gobierno sigue cumpliendo como excelente alumno los dictados del FMI, significa que no tiene intención de otorgar un reajuste salarial, al menos lo detendrá lo más que pueda hasta hacerlo demagógicamente con fines reeleccionista, mientras el Fondo sigue imponiendo las políticas macro económicas para mantener la disciplina fiscal.

Corresponde entonces a los trabajadores movilizarse para iniciar una lucha por un reajuste, las dirigencias han anunciado que se reúnen el 21 con los representantes del gobierno, de antemano debe prepararse una movilización nacional para presionar por el reajuste. Mientras tanto ya entró en vigencia el nuevo trancazo asestado por la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) a los abonados.

Otro sector muy golpeado es el magisterio y este gremio conformado por casi 60,000 docentes debe presionar para recibir un reajuste, a pesar de que el magisterio es pagado por el gobierno, no entra en las negociaciones que realizan los representantes de los empleados públicos, por lo tanto, se debe iniciar una serie de actividades para presionar por el mismo objetivo.

¡Las dirigencias de las Centrales Obreras tienen la obligación de movilizar y exigir un reajuste salarial