Por José René Tamariz

En los dos últimos meses se ha escrito en la prensa una gran cantidad de artículo sobre la problemática que enfrenta el régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), producto del estudio actuarial que realizó la escuela de matemática de la Universidad de Costa Rica (UCR). Este régimen de pensiones es el más importante del país, ya que agrupa a la mayor cantidad de trabajadores. Según ese estudio actuarial las reservas de dicho fondo, cercanas a dos billones de colones, se agotaría entre los años 2027-2034, es decir, dentro de unos 10 o 14 años, lo cual llevaría a este sistema de pensiones a la crisis total y, por ende, a una grave crisis social de incalculables dimensiones.

Algunos Datos Sobre el IVM

Al IVM se encuentran afiliados 1.4 millones de trabajadores. Actualmente ese régimen de pensiones cuenta con 225.000 pensionados. La cotización total es de 9.16%, porcentaje del cual corresponde el 1,24% al Estado, 2.84% a los trabajadores y el 5.08% a los patronos. La cantidad del monto de la pensión oscila entre el 43% y 52.5% del promedio de los últimos 240 salarios más el 0.0833% por cada una de las cotizaciones adicionales. La edad actual para pensionarse es de 65 años.

Las Reformas Propuestas por el Estudio Actuarial de la UCR

El estudio realizado por la escuela de matemática de la UCR plantea cuatro posibles escenarios para la jubilación en el régimen IVM de la CCSS. Solamente en el primer escenario la edad para retirarse queda en los 65 años con 25 años cotizados o 300 cuotas y el monto de la pensión quedaría reducida al 40% por los primeros 20 años. En los tres siguientes escenarios el retiro se realizaría entre los 65 y 70 años. En estos últimos escenarios, la mitad de trabajadores se retirarían a los 65 años, mientras que las personas que tengan entre 15 y 25 años de cotizaciones se retirarán a los 70 años.

Lo anterior quiere decir que el 50% de los cotizantes al IVM se pensionarían a los 70 años. Como se puede observar ese tipo de medida son salvajes. Al final esas reformas se podrían resumir en los siguientes puntos: 1) aumentar la edad para pensionarse de 65 a 70 años. 2) incrementar la cotización tripartita, obrero-patronal-Estado, del 9.16% actual hasta el 26.4%, porcentaje del cual correspondería el 3.69% al Estado, el 8.72% al trabajador y el 13.99% a los patronos. Esos incrementos de los porcentajes en las cuotas se realizarían de forma escalonada, quedando entre el año 2019 y el año 2060. 3) disminuir el monto de la pensión al 40% del promedio del salario de los trabajadores.

La Discusión Actual Sobre el IVM

Producto del estudio y propuestas de la escuela de matemática de la UCR sobre el régimen IVM se ha abierto una fuerte polémica y diversas alternativas de solución al deterioro de ese sistema de pensiones y de su eventual crisis. Ciertos neoliberales han planteado un conjunto de posiciones delirantes y desquiciadas, tales como, que las pensiones del IVM son una “estafa” porque, supuestamente, utiliza un esquema Ponzi, lo cual es falso, ya que ese es un sistema de fraude financiero; algunos señalan que existe una “quiebra” del régimen de IVM lo que tampoco es cierto, aunque existe una situación delicada del régimen sino se toman medidas adecuadas y correctivas; otros plantean abiertamente la privatización de las pensiones al estilo Chile y otros países, la cual se ha demostrado con los hechos que son un fracaso rotundo; mientras que algunos diputados plantean la supervisión por parte de la Superintendencia de Pensiones (SUPEN) del IVM.

Frente al estudio sobre el IVM realizado por la UCR, la Junta Directiva de la CCSS, para esconder todos sus errores y desastrosa administración de ese régimen de pensión, decidió, de forma burocrática e inconsulta, elevar la cuota obrera del 2.84% al 3.84% de los salarios del IVM a partir del mes de junio. Esta medida burocrática constituye un zarpazo sobre los bajos salarios de los trabajadores en general los cuales, prácticamente, han sido congelados por más de dos años por pírricos reajustes del gobierno de Solís.

Por otro lado, la Junta Directiva de la CCSS estudia la propuesta del auditor de esa institución, José Arturo Hernández, de trasladar los fondos del Régimen Obligatorio de Pensiones Complementarias (ROPC) y del Fondo de Capitalización Laboral (FCL) hacia el régimen de IVM. Este sistema de pensiones complementarias es de tipo privado, tanto por su forma de administración, ya que los fondos de ambos (ROPC y FCL) de 4.7 billones de colones, o sea, más de 8.377.9 millones de dólares al cambio actual son administrados por instituciones financieras sean privadas o públicas, así como porque las cuentas de esas pensiones son individuales. La combinación del régimen básico de pensiones IVM y el régimen complementario constituyen un modelo mixto de pensiones. El régimen complementario de pensiones tiene un conjunto de problemas al cual no nos vamos a referir en el presente artículo. No obstante, la propuesta de los funcionarios de la CCSS de trasladar los millonarios fondos del régimen complementario de pensiones y del fondo de capitalización al IVM, dada la situación delicada y de eventual crisis del IVM, constituye otra propuesta desquiciada de los malos administradores del IVM y de la CCSS.

Entonces, ¿Cuáles son las Propuestas de Solución del Régimen IVM?

Las propuestas de los actuarios de la escuela de matemática de la UCR para resolver los problemas que enfrenta el régimen de pensiones de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) de la CCSS, constituyen medidas salvajes al peor estilo de los neoliberales. Llevar la edad para pensionarse de 65 a 70 años significaría que miles de personas no puedan disfrutar de sus pensiones, porque se morirían trabajando, mientras que muchos miles solamente podrían disfrutar de algunos años de pensión, considerando que la esperanza de vida promedio en Costa Rica es de 79.4 años.

Por otra parte, aumentar la cotización sobre los salarios del 2.84% hasta el 8.72%, o sea, más del 200% de incremento, constituye un verdadero zarpazo contra los escuálidos salarios de los trabajadores, una verdadera expropiación de los ingresos de la mayoría de la clase trabajadora.

De otro lado, disminuir el monto de las pensiones al 40% sobre los salarios, ya de por sí miserables en el régimen IVM, representaría un empobrecimiento absoluto y masivo, llegando a la indigencia y pauperización, de todos los pensionados del IVM. Por ende, todas esas salvajes medidas de los actuarios de la UCR deben ser rechazadas de plano y combatidas, para que no sean aplicadas, por el movimiento sindical de forma unitaria.

El aumento de la cotización obrera del uno por ciento decretado, arbitraria e inconsultamente, por los burócratas de la Junta Directiva de la CCSS, de igual forma debe ser rechazado y echado abajo, vía movilización, por las organizaciones sindicales. Asimismo, la desquiciada propuesta de los burócratas de la CCSS de trasladar los millonarios fondos del ROPC y FCL al régimen de pensiones de IVM también deben ser rechazadas y combatida para que ni siquiera sea discutida.

Según han anunciado los funcionarios de la CCSS y del Ministerio de Trabajo en el mes de febrero se iniciará la discusión de las “reformas” del régimen de pensiones de IVM, tomando como base el estudio de los actuarios de la escuela de matemática de la UCR, así como todas aquellas que lleguen a la CCSS. El movimiento sindical debe discutir y votar una propuesta unificada frente a este grave problema que enfrente el IVM y frente a las propuestas neoliberales y descabelladas, tanto de los actuarios de la UCR, de los burócratas de la Junta Directiva de la CCSS y otros funcionarios de la misma institución.

Propuestas de solución

De último, planteamos algunas posibles propuestas en la dirección de contribuir a la solución de evitar que se produzca la crisis del régimen de pensiones de IVM hacia los años 2027-2034. Veamos.

1. Exigir el pago de todas las cuotas millonarias adeudadas por el Estado al régimen de pensiones de IVM.

2. Obligar a los empresarios a pagar las cuotas millonarias adeudadas por pensiones al régimen IVM.

3. Imponer la aplicación del artículo 78 de la Ley de Protección al Trabajador que obliga a las empresas públicas (10 empresas e instituciones) a trasladar entre un 5% y 15% de sus utilidades al fondo de pensiones del régimen IVM.

4. Exigir al gobierno incremente su aporte al régimen de pensiones de IVM hasta el 3.69% propuesto por los actuarios de la UCR.

5. Exigir a los patronos el aumento de sus aportes al régimen de pensiones de IVM hasta el 13.99% propuesto por los actuarios de la UCR.

6. Realizar inversiones del fondo de reserva del régimen IVM en obras pública de infraestructuras, no sólo en bonos del Estado.

7. Combatir el desempleo del 10% y la informalidad del 45%, mediante la implementación de un plan de obras públicas que disminuya drásticamente la tasa de desocupación y la informalidad y, de esa forma, aumentar la población cotizante al régimen de pensiones de IVM.

8. Realizar una campaña de afiliación al régimen de pensiones de IVM entre la población informal, así como entre otros sectores para aumentar la cantidad de cotizantes a ese régimen.

9. Reducir los gastos administrativos del régimen de pensiones de IVM y el despilfarro.

10. Que la Junta Directiva de la CCSS esté integrada de forma mayoritaria por el sector de trabajadores que representan la mayoría de cotizantes, así como en cuanto a ingresos de la institución.