Este 3 de marzo de los 6,214,399 salvadoreños registrados   para emitir el voto, solo votaran 5, 473 305, debido a que 741 094  en el exterior no participarán. Son estos 5, 473 305 quienes  después de la reducción de los 262  municipios  tendrán que elegir a sus respectivos gobernantes municipales como son  Alcaldes, síndicos y regidores de los ahora solo 44 municipios,  dentro de los partidos políticos que participan están NI, ARENA, FMLN, GANA, PDC, PCN, CD, NUESTRO TIEMPO, VAMOS, FUERZA SOLIDARIA, FPS.  Así mismo se  elegirán 20 Diputados para el Parlamento  Centroamericano. (PARLACEN), para los cuales solo han presentado candidatos 8 estos son: NI, ARENA, FMLN, GANA, PDC, PCN, CD,  FUERZA SOLIDARIA.

Impago de FODES

En 1998 fue aprobada la Ley de Creación del  Fondo para el Desarrollo Económico y Social de los Municipios de El Salvador, (FODES) mediante la cual  inicialmente asignaban a las Alcaldías un 8%  pasando finalmente a un 10% de los de los ingresos corrientes netos del Presupuesto General de la Nación.  Con dichos fondos las alcaldías podían hacer obras  en beneficio  de las comunidades. Con la llegada de Bukele  la transferencia de dichos fue retrasada,  ahogando financieramente a los gobiernos municipales y evitando que estas hicieran obras en sus comunidades,  llevando hasta el impago de sus trabajadores. 

Lo anterior terminaría impactando en las elecciones municipales en donde por ejemplo ARENA paso de 139 alcaldías que había ganado en el 2018 a solamente obtener 35 en el 2021, por su parte el FMLN paso de 64 a 30, mientras  Nuevas Ideas  obtuvo 152    de las 262, lo que representa un 57. 25% de las municipalidades, mientras en las Legislativas logro obtener 56 de los 84 diputados, un 66.66% del total.  

DOM: concentración de poder,  fondos y negocios

Los resultados de las elecciones a nivel municipal  nada le gustarían a Bukele en sus planes de concentración del poder y de hacer negocios desde las estructuras de los gobiernos locales, es por ello que realizaría una serie de maniobras “legales” para continuar ahogando las Alcaldías,  una de esta maniobras fue  que sus Diputados aprobaran en el 2021  Ley de creación de la Dirección Nacional de Obras Municipales (DOM) siendo este organismo el  “…responsable de calificar, aprobar, contratar y ejecutar los proyectos de inversión, financiados con recursos provenientes de los fondos asignados en su presupuesto…”  y pasar del 10% que se le asignaba a las Alcaldías a solamente un 3% para la  ejecución de obras municipales debiendo… aplicarse prioritariamente en obras de infraestructura…” y si sobra podría invertir en otras áreas.

El gobierno central consciente del impacto negativo que generaría la falta de obras en beneficio de las comunidades por parte de los gobiernos locales  de los cuales  NI administra el 57. 25% para evitar que esto impactara en las elecciones legislativas tuvo que  separarlas   de las municipales, realizándolas por primera vez después de los Acuerdos de Paz Junto a las Presidenciales. Agregado a  lo anterior, redujo  los gobiernos municipales de 262 a 44.

Los trabajadores y pueblo han pagado los platos rotos

El discurso de Bukele antes que su partido Nuevas Ideas (NI) llegara a las Alcaldías fue que dichos gobiernos eran corruptos extiendo su campaña de la lucha de la corrupción y que el dinero no alcanza cuando no se lo roban.

Ahora que su partido NI está en los gobiernos locales, y aun con la DOM privilegiando a dichos gobiernos de NI, estos no han podido hacer mayores obras en beneficio de toda la población que habita en dichos municipios, lo cual ha generado rechazo e inconformidad. Agregado a ello están los efectos negativos de los desalojos sufridos por los trabajadores por cuenta propia a quienes no se las ha dado una respuesta real al desempleo que permita a estos asegurarles un nivel de vida digno.

Han sido los trabajadores municipales quienes han sufrido los efectos negativos de los cambios de gobierno municipales independientemente el partido, ARENA, FMLN, etc. y ahora NI quienes han terminado recargando la crisis y sus luchas partidarias por el poder en los trabajadores.

Los miembros de los Consejos Municipales de los partidos de la oposición han mantenido un total silencio y hasta cierto punto complicidad de las acciones realizadas en contra de los trabajadores municipales y demás sectores populares por parte de NI.

Por la otra parte los Diputados del PARLACEN independientemente del partido a que pertenecen, no realizan mayor trabajo en beneficio del pueblo salvadoreño.

PSOCA llama a Votar Nulo

En estas elecciones municipales y de Diputados al PARLACEN del 2024, el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llama, a quienes asistan a las urnas, a votar Nulo,  ya que esta  es una forma activa para protestar en contra de todos los partidos políticos en contienda los cuales no defienden, ni han defendido los intereses del pueblo salvadoreño, ni de los trabajadores municipales a si mismo  han mantenido la inacción ante  el Bukelismo. Quienes ya gobernaron poco o nada hicieron a favor de los habitantes de sus municipios, recargándolos en muchos casos con impuestos.

La protesta no debe terminar con el voto nulo sino continuar por exigir mayor asignación presupuestaria para las Alcaldías, una verdadera fiscalización y conocimientos de la inversión priorizando el área social. Desde las municipalidades bien pudieron ampliar los mecanismos de participación popular local pero ningún partido lo ha hecho, es por ello que se le debe exigir.

Centroamérica, 27 de Febrero del 2024

Secretariado Ejecutivo Centroamericano (SECA)

Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)

El próximo 4 de febrero del 2024 se realizarán las elecciones generales en El Salvador, donde en un mismo acto se elegirán el presidente de la República, diputados para la Asamblea Legislativa (AL) y Parlamento Centroamericano (PARLACEN).

En esta ocasión, en el pináculo electoral, como principal centro de atención se encuentra la  polémica reelección del presidente Nayib Bukele, quien logra burlar, con una sentencia judicial, las normas  constitucionales que prohíben, la reelección inmediata. La oposición parlamentaria ha reprochado tal pretensión de Nayib Bukele, pero no ha logrado impulsar ninguna acción de masas que lo impidiera.

La reelección no es un problema de principios para los socialistas centroamericanos. El pueblo tiene derecho a elegir a su gobierno por mayoría de votos. El problema es que la reelección de Bukele se monta sobre un recorte de las libertades democráticas, la persecución de los dirigentes sindicales, y un grave retroceso antidemocrático del sistema electoral, que hoy es más restrictivo que antes. Por eso nos oponemos tajantemente a este tipo de reeleccion.

Por parte de la oposición burguesa, se integraron a la contienda electoral por la presidencia, los siguientes candidatos: Joel Sánchez, por Alianza Republicana Nacionalista (ARENA); Luis Parada, por Nuestro Tiempo (NT); Manuel Flores, por Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN); Javier Renderos, por Fuerza Solidaria (FS); y; Marina Murillo, por Fraternidad Patriota Salvadoreña (FPS).

Reelección y cambios antidemocráticos al sistema electoral

La candidatura de Nayib Bukele, corre por una coalición “atrapalotodo”, compuesta por Nuevas Ideas (NI), Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA), Partido de Concertación Nacional (PCN), y Cambio Democrático (CD). En la práctica este bloque funciona activamente dentro de la AL, siendo mayoría absoluta. Mediante la mayoría actual de diputados, Bukele ha podido modificar y hacerse del control de toda la institucionalidad del Estado. De esta manera, fue posible que magistrados de la Sala de lo Constitucional emitiera la sentencia No 1-2021, de fecha 3 de septiembre de 2021, que lo habilitó de manera temprana para su reelección. Para garantizar el control del proceso electoral, Bukele impulsó las primeras reformas electorales, el 15 de marzo de 2023, con la derogación del artículo 291-A del Código Electoral (CE), para poder hacer cambios  al sistema electoral un años antes de la votación.

El 11 de julio de  2023 se aprobaron las reformas al CE para que se incluyan fotografías y nombres de candidatos en las papeletas de votación. También fue aprobado el cambio de sistema de votación del cociente residual por el sistema de la media mayor, eliminando la representación de las minorías. Otra reforma electoral fue la reducción de 84 a 60 diputados. Después, con la Ley especial para la reestructuración Municipal, se redujo de 262  a 44 municipios, reduciendo la participación de la población en los territorios. Al centralizar la representación popular en pocas personas, se restringe o limita la participación popular, se elimina la representación de las minorías, creando un sistema mas elitista que crea las condiciones para un partido hegemónico.     

Bukele quiere reafirmar el control de la Asamblea Legislativa   

Las encuestas dan por ganador a Nayib Bukele con un 60% de los votos, en las elecciones del 4 de febrero próximo De confirmarse esa tendencia, la coalición oficialista obtendrá amplia mayoría en una asamblea cuyo número de diputados se ha reducido, garantizándote de esta forma la mayoría absoluta para reformar la Constitución y garantizar la reelección indefinida, con el propósito de consolidar su régimen bonapartista en vía acelerada hacia una nueva dictadura. Bajo el esquema del nuevo sistema de conteo de votos, las asignaciones  de diputados y concejales se realizarán con los escaños que obtengan los promedios más altos, dándole clara la ventaja  a la coalición de Bukele. El nuevo sistema de conteo de votos, no permite la representación de las minorías.

La seguridad como mejor carta de presentación        

Bukele se presenta como el líder carismático que rescató a El Salvador del mal que no pudo solucionar  el bipartidismo ARENA-FMLN: las pandillas. El logro más importante de Bukele ha sido la desarticulación de las pandillas que controlaban amplios territorios. Los planes de seguridad que le antecedieron fallaron, solo maquillaron el problema de la violencia. Incluso el Plan Control Territorial de Bukele había fracasado, pero el viraje a última hora instaurando  el régimen de excepción fue una improvisación surgida a consecuencia del atolladero de las negociaciones de Bukele  con las pandillas.

El régimen de excepción ha sido una herramienta operativa que permitió capturar a los pandilleros y la liberación de los territorios que estaban bajo su control. El encarcelamiento de más de 71,000 personas en el marco del régimen de excepción, han caído prisioneros justos por pecadores. Existen denuncias de torturas. Las muertes de personas recluidas superan las 300, muchas han muerto por negligencia o asesinadas por el Estado. Algunos han sido liberadas condición médica crónica. Para Bukele esto es simple daño colateral. Estos abusos dieron como resultado el surgimiento del Movimiento de Familiares de Víctimas del régimen de Excepción (MOVIR), quienes se han transformado en el sector que mas ha luchado contra Bukele

Reacomodos de los grupos de poder y aceptación tácita de Estados Unidos

Al comienzo de su mandato, Bukele tuvo que afrontar la oposición de grupos empresariales y de poder. En el transcurso del tiempo, estos grupos de poder se han puesto de acuerdo y aceptan que Bukele juega el rol de salvador del Estado. Incluso, las críticas que Estados Unidos hizo en su momento sobre los ataques a la libertad de prensa, y violaciones a los derechos humanos, han sido abandonadas. Altos funcionarios de Estados Unidos han visitado recientemente El Salvador, lo que demuestra que existe un reconocimiento tácito al rol que Bukele juega por el momento, en su afán de reordenar las instituciones del Estado.

Demagogia y represión sindical

Mientras Bukele goza de popularidad y del reconocimiento de los grupos de poder, está atacando de manera sistemática y en silencio a los sindicalistas que se le oponen, acosando, despidiendo a los dirigentes más combativos, utilizando el Ministerio del Trabajo para entregar las directivas sindicales a sus seguidores, atemorizando al resto de activistas sindicales.

Bukele creó ilusiones que podía dar una reforma al sistema de pensiones que liquidara el esquema neoliberal actual del Sistema de Ahorro de Pensiones (SAP), logrando engañar y atraer a un sector de los dirigentes  sindicales. Con el control cuasi total del movimiento sindical y con mayoría absoluta dentro de la Asamblea Legislativa, el bukelismo  el 20 de Diciembre del 2022 realizó una vulgar reforma al SAP. Esta reforma fue una maniobra que sólo sirvió para maquilla la deuda pública: Por cierto, el Gobierno hace uso discrecional de los fondos de pensiones. Estos movimientos financieros han sido declarados reservados por 7 años.

El talón de Aquiles de Bukele sigue siendo la crisis económica y la falta de empleo.

Los precios de la canasta básica siguen al alza Entre 2019 y 2022 el precio de la canasta básica oscilaba   entre $198 y $212 dólares en la zona urbana, para el cierre de 2023 ronda los $257,81 y $193,48 dólares. En la  zona rural, en ese mismo periodo, aumentó de $145 y $183 dólares a $193,48.

Para este 2024 el Gobierno hizo un enorme recorte en materia social, siendo lo inverso del Plan Cuscatlán, demostrando el poco interés por atender a la clase trabajadores y sectores populares. Los recortes fueron así: $40 millones menos para el Ministerio de Desarrollo Local; $10.2 millones menos en el Ministerio de Vivienda; $38.2 millones menos para la Procuraduría General de la República; $90.9 millones menos en el Ministerio de agricultura y Ganadería y; $17 millones menos en el Ministerio de Trabajo y Previsión Social. 

Solo queda protestar activamente con el voto nulo   

Las elecciones generales del próximo 4 de febrero se realizarán en el marco de una aguda crisis fiscal y un prolongado estancamiento económico. Aun así, por el efecto de haber puesto a raya a las pandillas, Bukele seguramente ganará la presidencia y una mayoría absoluta en la Asamblea Legislativa y diputados al PARLACEN.

La reelección de Bukele ya es una realidad, no solo porque ha logrado cautivar al 60% de la población que se encontraba desesperada por las pandillas, sino, también, porque los diferentes grupos de poder de empresarios han cerrado filas en torno a su proyecto. Un segundo mandato de Bukele es inevitable. Las masas trabajadoras y la clase media tendrán que convencerse, por experiencia propia, que la demagogia de Bukele acarreará grandes limitaciones económicas, mas grave de las que ya soportamos, y que detrás de su gobierno están los empresarios deseosos de recomponer sus negocios.

El sistema electoral se ha vuelto más antidemocrático, restringiendo la participación de nuevas fuerzas políticas. En estas condiciones, sin la existencia de una verdadera oposición revolucionaria, no hay una opción política aceptable para los trabajadores y el pueblo. Por ello, desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llamamos al voto nulo para  demostrar nuestro rechazo activo al proyecto dictatorial de Bukele.

Las bases para la instauración de una nueva dictadura ya han sido colocadas, nos tocare reagrupar a las fuerzas sindicales y de izquierda para luchar por las transformaciones democráticas que necesita El Salvador.

Centroamérica, 31 de enero del 2024

Secretariado Ejecutivo Centroamericano (SECA)

Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)

El Ministerio Publico (MP) de Guatemala, bajo la conducción de Consuelo Porras, no solo ha acosado y perseguido a miembros del partido “Semilla”, sino que recientemente ha ampliado la persecución penal contra activistas estudiantiles y docentes de la Universidad de San Carlos (USAC).

El MP ha girado varias órdenes de captura y ya ha realizado las primeras detenciones. Estos hechos constituyen una operación represiva que vincula dos situaciones distintas: por un lado, la toma de la USAC en 2022 y 2023, en protesta contra el fraude electoral del ahora rector Walter Mazariegos, y por el otro lado, la reciente persecución contra dirigentes del partido Semilla, con la finalidad de consumar el golpe de Estado, para que Bernardo Arévalo no asuma como presidente Guatemala, el próximo gobierno el 14 de enero de 2024.

Tal operación responde a los intereses del bloque conservador en el poder -el llamado “pacto de corruptos”, que representan el gobierno de Alejandro Giammattei y la fiscal general, Consuelo Porras. El MP, como si se tratase de una absurda burla, por medio de las fiscalías de Protección al Patrimonio y Contra la Corrupción, ha ampliado la persecución penal contra diputados del partido Semilla,  y de los partidos Movimiento Winaq y Grupo Democrático (Voluntad, Oportunidad y Solidaridad), fuerza que participaron en la Digna Resistencia Universitaria.

Con objetivo de atemorizar a las fuerzas políticas y sociales que luchan en su contra, el régimen político actual utiliza operaciones psicológicas y de persecución penal contra opositores de diversas tendencias.

El Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llama a todas las fuerzas políticas a movilizarnos para exigir el cese de la persecución penal contra dirigentes de Semilla y activistas de la pasada lucha por la autonomía universitaria en la USAC. Nos solidarizarnos con los perseguidos y detenidos por el MP, llamamos a la movilización general contra el golpe de Estado. En especial, llamamos a las organizaciones estudiantiles y de docentes universitarios de Centroamérica, a movilizarnos para exigir la libertad de todos los detenidos y el cese de la persecución contra los imputados por el MP.

Alertamos sobre cualquier provocación que busque desatar la represión física contra el derecho a la protesta y la libertad de expresión. Las protestas deben mantener su independencia política con respecto a los acuerdos que han surgido entre el presidente electo Bernardo Arévalo, sectores de la burguesía y las dirigencias indígenas, que han conducido a un estancamiento de las luchas, situación de desmovilización social que ha aprovechado el MP para continuar su arremetida contra las organizaciones y personas que luchan por la democratización de Guatemala

Centroamérica 16 de noviembre de 2023.

Secretariado Ejecutivo Centroamericano (SECA)

Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)

 

A pesar que Bernardo Arévalo, presidente electo, ha manejado un discurso conciliador con el CACIF y los grupos de poder, las mafias enquistadas en el Estado han continuado su ofensiva con el objetivo de forzar una negociación que garantice “un pacto de impunidad” y, en el peor de los casos, revertir el resultado electoral a través de maniobras ilegales.

Después de un largo forcejeo, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) emitió su declaración final proclamando ganador a Bernardo Arévalo. No obstante, Rafael Curruchiche, de la Fiscalía Especial contra la Impunidad (FECI), procedió a requisar las actas electorales, con el claro objetivo de crear condiciones para la anulación del proceso electoral. La FECI y el Ministerio Publico no atacan los resultados de la primera vuelta, donde se decidieron las diputaciones y las alcaldías, sino que ataca específicamente los resultados de la segunda vuelta, es decir, la elección presidencial

Bernardo Arévalo y el Movimiento Semilla, cuya personalidad jurídica ya fue suspendida, han declarado que las mafias en el poder están organizando un “golpe de Estado”. Mas que un “golpe de Estado” contra un presidente electo que no ha asumido el poder, estamos ante una especie de “auto golpe” de Estado de encabezado por el propio Giammattei y las mafias que se resisten a entregar el poder. Es una situación similar, aunque en un contexto diferente, al auto golpe que Serrano Elías intento en 1993. Es un intento de los grupos de poder por mantener el statu quo. En todo caso, este “auto golpe” de Estado está dirigido directamente contra la voluntad popular expresada en la segunda vuelta electoral.

Estos ataques desde el poder, han aumentado el descontento de importantes sectores de la población, que iniciaron movilizaciones populares exigiendo la renuncia de Consuelo Porras, jefa del Ministerio Publico, quien encabeza las acciones contra Bernardo Arévalo y el Movimiento Semilla. Pero la dinámica de las movilizaciones ha comenzado a rebasar la consigna de renuncia de Consuelo Porras, transformándose en un enfrentamiento directo contra las mafias en el poder

Indudablemente, todas las acciones contra el resultado electoral se hacen fuera de todo el marco legal y constitucional en materia electoral, y tienen el respaldo del gobierno de Alejandro Giammattei Falla y de sectores de la oligarquía que están asustados con la dinámica de movilización social que se reagrupa en defensa de los resultados de la segunda vuelta electoral.

Giammattei declaró en la ONU que entregaría el poder al presidente electo en enero del 2024. Pero en el antidemocrático sistema electoral de Guatemala, existe un largo periodo de transición de seis meses entre la segunda vuelta electoral realizada en agosto, y la entrega de la banda presidencial en enero de 2024. Este interregno esta siendo utilizado para arrodillar a Arévalo y en caso extremo anular el resultado de la segunda vuelta electoral.

Si bien es cierto, Arévalo en determinado momento llamó a la movilización para presentar un recurso de amparo, que ya fue negado por la Corte de Constitucionalidad (CC), lamentablemente ha priorizado recurrir al Departamento de Estado de los Estados Unidos para contrarrestar las maniobras de la FECI y el Ministerio Publico. Incluso, ha declarado que en Guatemala se debe aplicar la “Carta Democrática” de la Organización de Estados Americanos (OEA), un organismo inútil que solo defiende los intereses de Estados Unidos, que si bien es cierto ha criticado los desmanes contra Arévalo, actúa como conciliador para evitar que se produzcan los cambios revolucionarios que Guatemala urgentemente necesita

En la lucha contra las mafias, podemos marchar unidos con diferentes sectores, pero el movimiento popular no debe perder la brújula, ni su independencia política. No podemos confiar en la diplomacia, solo en la movilización popular independiente. Un grave error que está cometiendo Arévalo es priorizar la diplomacia burguesa, colocando en ultimo lugar la movilización popular, que es la única que puede detener las maniobras de los mafiosos.

Como era de esperarse, los ánimos populares están caldeados, y las organizaciones populares, campesinas e indígenas, que no tienen ninguna relación orgánica con el Movimiento Semilla, han comprendido la gravedad de la situación y se han colocado al frente de la movilización por defensa de los resultados electorales.

Se cumplió una semana de bloqueos de carreteras y caminos (50 bloqueos, según algunos medios hasta el sábado7 de octubre), protestas protagonizadas por autoridades indígenas, originalmente por los 48 Cantones de Totonicapán, el Parlamento Xinca y las autoridades indígenas Ixiles y de Sololá. Los bloqueos han ido creciendo desde que iniciaron el pasado 2 de octubre, con un plantón permanente, además, en la sede del MP en la Zona Uno de la Ciudad de Guatemala.

Se han sumado a estas movilizaciones en lo últimos días pobladores de varios municipios del interior, y lo nuevo ha sido que vecinos de barrios y colonias del área metropolitana han tomado desde el 6 de octubre varias arterias principales. De igual forma, se han reactivado los estudiantes de la Universidad de San Carlos (USAC) quienes mantienen dos bloqueos en las entradas del campus central en la Zona 12 capitalina; además, ha habido marchas de estudiantes de varias universidades privadas.

A las movilizaciones se han sumado médicos de los hospitales públicos, cuestionando la demagogia del ministro salud de que los bloqueos están provocando escasez, cuando esta es una problemática de ausencia de presupuesto. Se han sumado además maestros vinculados al Sindicato Autónomo del Magisterio de Guatemala, aunque sigue ausente el gran Sindicato de Trabajadores de Educación (STEG), dirigido por Joviel Acevedo

La movilización popular contra las mafias va en ascenso, aunque todavía no se hace presentes los sindicatos obreros. Una serie de sindicatos y pequeñas centrales obreras se han pronunciado contra el “auto golpe”, pero sin lograr movilizar a los trabajadores a excepción del Sindicato de Trabajadores de Coca Cola.

Por otro lado, las cámaras empresariales, en una serie de comunicados, pese a decir que se debe respetar el resultado electoral, exigen a las autoridades reprimir y levantar por la fuerza los bloqueos. La Corte de Constitucionalidad, alineada a estos poderes fácticos, ordenó a la Policía Nacional Civil, tras un amparo de los grupos capitalistas, desbloquear los puntos.

Estas movilizaciones revitalizan la energía de las masas después que las concentraciones de La Plaza de 2015 se desviaran hacia la institucionalidad burguesa, aireando a gobiernos conservadores como del de Morales y el actual del partido VAMOS.

La dinámica general es de movilizaciones combativas pero dispersas, desconectadas unas de otras. Es urgente conformar una coordinadora popular, de estudiantes, trabajadores, campesinos e indígenas, en defensa de la voluntad popular expresada en las urnas durante la segunda vuelta electoral.  Las movilizaciones dispersas y sin coordinación son fácilmente sofocadas por la represión y eso puede desmoralizar a las masas populares.

Desde el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) consideramos que la coyuntura actual obliga a tomar tres medidas urgentes:

1.- Crear esa Coordinadora Popular como organismo de coordinación centralizada de todas las acciones que, de coherencia y objetivos claros a las movilizaciones, en donde los diferentes sectores discutan la situación política y aprueben por mayoría los planes a seguir.

2. Convocar a un Paro Nacional de 72 horas, convocado por los sectores populares, con el objetivo no solo de exigir la renuncia de Curruchiche y Consuelo Porras, sino de exigir que se detengan todas las acciones legales contra el equipo del presidente electo.

El Paro Nacional del 2015 permitió terminar con el corrupto gobierno de Perez Molina. Ahora debemos reeditar este tipo de movilización, a una escala mayor, porque mayor es la resistencia de las mafias en el poder.

3.- En las movilizaciones se deben conformar grupos de autodefensa para garantizar el orden en las movilizaciones y, si es necesario, enfrentar las agresiones de grupos de derecha, y la represión del gobierno de Giammattei

De manera especial, llamamos a los grupos de izquierda en Guatemala, a las organizaciones obreras, campesinas, estudiantiles e indígenas, a crear un Polo Revolucionario que actúe como conducción política dentro de esa posible Coordinadora Popular, y coadyuvar en este proceso de cambios, que apenas está comenzando y que en el futuro nos planteará desafíos mayores.

Centroamérica, 7 de octubre del 2023

Secretariado Ejecutivo Centroamericano (SECA)

Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)

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La primera vuelta electoral del 25 de junio en Guatemala tuvo un desenlace que causó sorpresa en todos los sectores involucrados. En primer lugar, a pesar de las inhibiciones de partidos y candidatos, de la implementación de trampas fraudulentas desde el poder, y de la altísima cantidad de votos nulos y abstenciones, el pueblo expresó su rechazo masivo contra las mafias en el gobierno, colocando a Bernardo Arévalo, candidato del Movimiento “Semilla”, un partido poco conocido y de reciente formación, en segundo lugar, garantizando con ello su participación en la segunda vuelta electoral.

La primera expresión del descontento popular fue el enorme porcentaje de votos nulos, un 17.39% de los votos emitidos (cerca de un millón) y un abstencionismo del 40% de los votantes registrados. La cantidad de votos nulos fue mayor que la que obtuvo el ganador del primer lugar, la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE), con un 15.86% de los votos. Como segunda expresión del descontento, el partido Movimiento Semilla, fue catapultado de un octavo lugar en las encuestas al segundo lugar con el 11.78%, pasando a competir en la segunda vuelta del próximo 20 de agosto, con la UNE.

Rechazo a las Mafias en el poder

Estas mafias representan los intereses de nuevos empresarios, militares y estructuras del crimen organizado que aprovechan los recursos del Estado, y una nube de funcionarios y políticos a su servicio, que se enriquecen ilícitamente en el ejercicio de sus cargos. Además, estas estructuras corruptas han iniciado un proceso de cambios antidemocráticos para afianzar su control sobre las instituciones del Estado, colocando a sus títeres en los tribunales de Justicia, el Ministerio Público, el Tribunal Supremo Electoral (TSE), la Corte de Constitucionalidad (CC), la Universidad de San Carlos (USAC), la Procuraduría de los Derechos Humanos, y reclutando y comprando diputados en el Congreso para garantizar una aplanadora legislativa.

¿Qué intereses representa la UNE?

La UNE ya fue gobierno entre 2008 y 2012, con la presidencia de Álvaro Colom. La UNE se define como socialdemócrata y ha sido miembro de la Internacional Socialista, pero ha sufrido una constante evolución hacia la derecha. Durante el gobierno de Colom se impulsaron una serie de programas sociales, como la entrega de bolsas de alimentos, de transferencias monetarias condicionadas para las familias, comedores solidarios, becas, Escuelas Seguras, etc. Pero en el gobierno, al momento de querer implementar reformas más profundas en el agro y la economía, o reformar la estructura tributaria, Colom fue incapaz de enfrentar a la oligarquía y su programa reformista se desvaneció, cuando el Congreso las rechazó una tras otra.

Así, el gobierno de la UNE pasó sin pena ni gloria, habiendo sido continuación del modelo neocolonial y neoliberal. Quien ganó poder en estos años fue la esposa de Colom, Sandra Torres, quien tuvo a su cargo los programas sociales, consolidando una base clientelar alrededor de UNE, factor que le ha permitido sobrevivir como partido político. A partir de 2011, Torres aumentó su poder dentro de la UNE intentando postularse a la presidencia ese año, siendo rechazada legalmente su candidatura por haberse sido esposa del último presidente en funciones. En las elecciones de 2015 y 2019, Sandra Torres logró lanzar su candidatura, perdiendo ambas veces el balotaje. En septiembre de 2019 fue apresada bajo cargos de delitos electorales; esto terminó de marcar el giro a la derecha de Torres y su partido, pues pactó con el gobierno corrupto de Alejandro Giammattei para que el caso fuese desestimado, a cambio de los votos de los diputados de la UNE en el Congreso a favor de las propuestas del oficialismo. Torres logró el control total del partido después de obtener su libertad, lo que obligó a la salida de los miembros que provenían de los movimientos sociales, opuestos al nuevo giro de la UNE.

UNE se ha convertido, pues, en un partido subordinado y auxiliar de las mafias en el poder. No es una casualidad que, ante la segunda vuelta electoral, los partidos reaccionarios hayan cerrado filas, a regañadientes, alrededor de Sandra Torres.

Orígenes del Movimiento Semilla

El Movimiento Semilla tiene su origen en 2014, en un grupo de discusión y reflexión de intelectuales y profesionales; en septiembre de ese año lanzaron un manifiesto como Grupo Semilla, posicionándose ante la situación nacional. Durante las protestas de 2015 y la caída del gobierno del gobierno de Otto Perez Molina, del Partido Patriota, el grupo empezó a tomar protagonismo y en 2016 inició el proceso para transformarse legalmente en partido político, lográndolo en julio de 2018. En las elecciones de 2019 Semilla intentó postular a la presidencia a la prestigiosa exfiscal general Thelma Aldana, pero la Corte de Constitucionalidad impidió su postulación. Aunque sin candidatura presidencial, Semilla obtuvo siete diputaciones al Congreso, un diputado al Parlamento Centroamericano, 3 alcaldías, 7 concejales municipales, 5 síndicos municipales y varios suplentes.

El Movimiento Semilla, con su candidato presidencial Bernardo Arévalo, logró llegar al segundo lugar en la primera vuelta, captando el voto mayoritariamente urbano, sobre todo en la clase media metropolitana, con un discurso democrático, anticorrupción y pro justicia social. Los defensores del statu quo desde entonces han lanzado una andanada imparable de ataques para frenar el ascenso de Semilla. Al frente ha estado Sandra Torres, con un discurso ultraconservador, en alianza con las principales iglesias evangélicas, acusando a Semilla de estar contra los valores familiares, de promocionar la ideología de género y la agenda 2030, de promover el aborto, de tener una política confiscatoria, de ser comunista y otros disparates similares.

Los partidos de derecha intentaron anular las elecciones, solicitando un recuento de las actas electorales, en base a ciertos indicios de irregularidades en algunas de ellas, pero el resultado del recuento no alteró la votación del 25 de junio. Entonces entró en acción el Ministerio Público (MP) y la Fiscalía Especial Contra la Impunidad (FECI), ahora en manos de conocidos agentes de las mafias en el poder, acusando a Semilla de anomalías en el proceso de su inscripción como partido, y utilizando a un juzgado para suspender la personería jurídica de Semilla. En vista de la ilegalidad de esta maniobra, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) decidió no obedecer la orden del juzgado y oficializó los resultados de la primera vuelta. La Corte de Constitucionalidad aceptó un amparo de Semilla para suspender la orden del juzgado, en aras de permitir el desarrollo de la segunda vuelta electoral, pero permitiendo al MP continuar con las investigaciones, lo que dio paso a una serie de allanamientos intimidatorios a las sedes de Semilla y del TSE.  

La única encuesta realizada hasta ahora, en torno a la segunda vuelta electoral, ubicó a Arévalo como candidato ganador, con el 63% del electorado a su favor, y a Torres con el 37% de la intención de voto. Semilla sigue capitalizando el voto urbano con un 45%, mientras que la UNE logró un 18%. En el interior, Arévalo tiene la preferencia del 43% de la intención de voto y Torres aumenta sus preferencias a un 30%.

El programa reformista pequeñoburgués de Semilla

Semilla no tiene un programa “progresista”, mucho menos anticapitalista. Ni siquiera contempla las reformas democráticas radicales propuestas por el Movimiento para la Liberación de los Pueblos (MLP) o la coalición URNG/WINAQ en temas como derechos de los pueblos indígenas, acceso a la tierra, recursos naturales, salarios y derechos laborales, o la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente. El sentido general de la propuesta de Semilla es logar el “normal” funcionamiento del Estado de Derecho, rescatándolo de las mafias corruptas, para “convertirlo en el promotor eficaz y eficiente del desarrollo, puesto al servicio del conjunto de la sociedad, no de sectores específicos y privilegiados” (Plan de gobierno Semilla). En pocas palabras, salvar al Estado burgués y al sistema capitalista neocolonial de la crisis que lo carcome.

Semilla tiene como principios básicos la democracia, equidad, pluralidad, economía humana y respeto a la naturaleza, sin ninguna referencia a las luchas de los trabajadores y sectores populares contra la dominación de la burguesía y la oligarquía guatemaltecas. Sugiere pactos interclasistas para lograr “consensos fundamentales que son necesarios para la construcción de un Estado democrático de derecho para todos y para todas…” (Ídem), en temas como educación, salud, desarrollo, medio ambiente y diálogo constitucional. ¿Consensos y pactos entre quiénes? Es obvio que no será solamente entre los trabajadores, campesinos, pueblos indígenas, mujeres y jóvenes; la difusa esperanza de construir “una nación plural, unida e incluyente; y una economía humana al servicio de la gente” (Ídem) deja intactos los intereses de la burguesía, oligárquica y no oligárquica, en estos futuros acuerdos, lo que frenará, como paso con el gobierno de Álvaro Colom, cualquier intento de reforma democrática o de avance social.

Como afirmara el candidato presidencial de Semilla, Bernardo Arévalo, en una reunión con la Cámara de Comercio de Guatemala: “…Necesitamos más empresarios, pero necesitan una economía competitiva, no una economía de privilegios … Necesitamos más empresarios para que haya más empleo” (Prensa Libre 08/08/2023). No hay duda, que el programa de Semilla pretende revitalizar al sistema capitalista, dándole un rostro más humano, una misión verdaderamente imposible.

Llamamos al voto crítico a favor de Semilla

Durante la primera vuelta, cuando el fenómeno político de Semilla no había surgido, el Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llamó a votar críticamente por la alianza URNG-WINAQ, porque,  habiendo sido excluido el MLP, era la unica opcion de izquierda que participaba en las elecciones. No obstante, los resultados de la primera vuelta electoral han marcado el fracaso de los partidos políticos que surgieron de la exguerrilla, cuyos programas y discursos no lograron atraer las simpatías populares.

Ni el movimiento sindical, ni las organizaciones indígenas y campesinas han podido hasta la fecha articular un movimiento contestatario autónomo y fuerte que inicie una lucha seria contra las mafias. En ausencia de una opción verdaderamente revolucionaria, que haga frente a las estructuras corruptas y autoritarias en el poder, la clase media y los sectores populares ven una esperanza en el planteamiento reformista y democrático de Semilla.

Para las masas populares, Semilla encarna las expectativas de un cambio democrático, la erradicación de los corruptos, el progreso y la justicia social; no perciben los aspectos contradictorios implícitos en su programa procapitalista y la participación del empresariado en sus planes.

Aunque Bernardo Arévalo jure de rodillas que buscará siempre acuerdos con la burguesía y la oligarquía, un triunfo electoral de Semilla en la segunda vuelta, generará mayores expectativas e ilusiones en las masas populares. Sin lugar a dudas, habrá agudas confrontaciones con las estructuras corruptas. En el Congreso enfrentará una fuerte oposición de la derecha, que hará lo imposible por no dejar pasar sus reformas, como ocurrió bajo el gobierno de Álvaro Colom; y si el MP consigue anular la personería jurídica de Semilla, su poder en el legislativo será nulo, quedando el gobierno atado de pies y manos. En estas circunstancias, ¿Estará dispuesto el gobierno de Semilla y Arévalo a movilizar en las calles a las masas que le dieron el voto, para defender las transformaciones democráticas? ¿O se repetirá la estéril experiencia del gobierno de Álvaro Colom y la UNE?

Se aproximan grandes acontecimientos en Guatemala, los que tendrán influencia inmediata en Centroamérica, una región dominada por regímenes bonapartistas y dictaduras. El Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) está del lado de las masas populares en su anhelo de profundos cambios democráticos y sociales, empezando por desalojar del gobierno a las mafias corruptas que parasitan del Estado. Por ello, llamamos a votar críticamente Bernardo Arévalo y Karin Herrera en la segunda vuelta electoral, este 20 de agosto del 2023. Pero alertamos que no podemos depositar nuestra total confianza en un gobierno de Semilla, solo necesitamos romper el statu quo y quebrar la continuidad de los últimos gobiernos derechistas y reaccionarios. Un triunfo de Semilla abrirá una nueva situación política en Guatemala, y refrescará al movimiento de masas.

Desde ya los trabajadores, campesinos, pueblos indígenas, mujeres, jóvenes, debemos trabajar para fortalecer nuestras organizaciones y unirnos para impulsar y defender con nuestras propias fuerzas los cambios democráticos que fueron prometidos. Solo la movilización independiente garantizara la realización de los cambios democráticos que tanto necesita Guatemala.

Centroamérica, 10 de agosto del 2023

Secretariado Ejecutivo Centroamericano (SECA)

Partido Socialista Centroamericano (PSOCA)         

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