Por Dionisio Xatruch

Los trabajadores de la Empresa Hondureña de Telecomunicaciones (Hondutel) vienen librando una dura batalla por preservar la empresa estatal, y con ello sus puestos de trabajo.

Pérdida del monopolio estatal

Desde su creación, en el año 1976, Hondutel mantuvo el monopolio de las telecomunicaciones hasta el año 1996, cuando bajo el gobierno de Carlos Roberto Reina, se produjo una privatización parcial de las telecomunicaciones, con la concesión de telefonía móvil otorgada a favor de la empresa transnacional Celtel (que posteriormente se convirtió en Tigo).

En el año 2001, bajo el gobierno de Carlos Roberto Flores, se produjo una nueva privatización parcial de telefonía móvil a favor de la transnacional Megatel (que posteriormente se convirtió en Aló y Claro). En el año 2007 se creó Honducel, una empresa de telefonía celular cuyo dueño es Hondutel, la cual comenzó a competir en desventaja en relación con las transnacionales. En 2008, CONATEL otorgó una nueva concesión a favor de Digicel, la cual terminó siendo absorbida por Claro. Esta fusión mostró la tendencia a crear grandes monopolios privados, en detrimento de los usuarios.

Esta historia de privatizaciones parciales ha resultado mortal para Hondutel, porque si bien es cierto no se ha vendido todavía la empresa, ésta ha quedado reducida a la mínima expresión, peleando el mercado contra poderosas transnacionales.

Corrupción y descapitalización

Las privatizaciones parciales del espectro radioeléctrico cortaron las piernas y los brazos a Hondutel. Desde entonces, la empresa arroja pérdidas que se ven agravadas por el saqueo de los gobiernos de turno.

Jesús Castellanos, ex gerente de Hondutel y recientemente destituido por Porfirio Lobo de su cargo de presidente de la Junta Interventora de Hondutel, denunció que los gobiernos de turno han sacado más de 20,000 millones de Lempiras de esta empresa.

Además, como Hondutel perdió el monopolio del espectro radioeléctrico, debe competir con las transnacionales, y por ello ha tenido que pagar 4.400 millones por la interconexión. Si a lo anterior agregamos 2.400 millones de lempiras que han sido pagados por licencia de importador internacional, tenemos un panorama desolador para la empresa estatal.

Los cantos de sirena de la “empresa mixta”

Una de las causas de la destitución de Castellanos fue que presentó un plan de rescate de la empresa estatal: Hondutel necesita 600 millones de dólares para salir adelante. Pero el gobierno de Lobo ha sido tajante: no quiere rescatar a Hondutel, sino privatizar parcialmente la empresa, argumentando que se requiere un socio privado, crear una “empresa mixta”, y recomendó a la Comisión para la Promoción de la Alianza Público-Privada (COALIANZA), que se encargue de buscarlo. Pero esta institución se deslindó de la propuesta de Lobo. Esta infructuosa búsqueda ya lleva más de 3 años. La primera licitación pública para vender una parte de Hondutel fue declarada desierta el 25 de enero 2013, por falta de oferentes.

La propuesta de Lobo pretende rematar definitivamente a Hondutel. Ningún empresario quiere darle oxígeno a Hondutel, más bien quiere terminarla de quebrar para comprar sus restos por algunos centavos, especialmente los servicios más rentables como internet y telefonía celular El socio imaginario que habla Porfirio Lobo, en realidad no existe. Es una estratagema para vencer la resistencia del pueblo que se opone a la liquidación de las empresas estatales.

SITRATEL propone plebiscito

Orlando Mejía, presidente del Sindicato de Trabajadores de Hondutel (Sitratel), ha lanzado la propuesta de convocar a un plebiscito para que el pueblo opine y decida si está de acuerdo con los planes del gobierno de Lobo de rematar Hondutel.

Mientras tanto, Sitratel sigue luchando por conseguir fondos inmediatos, desarrollando movilizaciones callejeras para exigirle al Congreso Nacional que apruebe fondos necesarios para evitar el colapso de la empresa.

Demagogia electorera de Romeo Vásquez

El general golpista Romeo Vásquez, que fue nombrado gerente de Hondutel en el periodo 2010-2013, se ha transformado repentinamente en un defensor de la empresa estatal. Obviamente, esta es una pose demagógica para ganar votos en la campaña electoral, sobre un tema sensible para la mayoría de hondureños.

La clase trabajadora debe ser vanguardia en esta lucha

Los trabajadores de Hondutel y Sitratel están peleando solos, defendiendo la empresa estatal. Han sido reprimidos y gaseados por la Policía, pero siguen luchando. El Partido Socialista Centroamericano (PSOCA) llama a los sindicatos, centrales obreras y demás organismos populares a cerrar filas en la defensa de Hondutel, exigiendo que el Congreso Nacional apruebe el presupuesto que permita salvar la empresa, mientras luchamos por la convocatoria de un plebiscito y convencemos a la mayoría del pueblo de la necesidad de devolver el monopolio del espectro radioeléctrico a favor del Estado y de su empresa Hondutel.